José Apezarena

Covid. ¡Los votos o la vida!

Vacunación contra el Covid.
Vacunación contra el Covid.

Cuando estalló la pandemia de coronavirus, es decir, en la primera ola de contagios, el Gobierno aprobó el confinamiento domiciliario de los españoles, que se mantuvo durante tres meses.

En ese tiempo excepcional, los individuos y las familias permanecieron encerrados en sus casas, mientras se paralizaba la actividad económica del país. Fueron tiempos muy duros, de los que recordamos, entre otras cosas, los aplausos desde los balcones a los agentes policiales al final de la tarde.

Cuando se anunció la desescalada, la Comunidad de Madrid reclamó con insistencia que, en su caso, se le permitiera hacerlo lo más pronto posible, para recuperar la normalidad comercial, productiva

Con ese motivo, se escucharon entonces, sobre todo desde la izquierda, voces críticas contra esas prisas, acusando al gobierno regional de poner por delante los intereses económicos frente a los riesgos sanitarios. Y fue un lugar común en no pocas tertulias televisivas.

No faltó quien, desde el socialismo, afirmara que los dirigentes madrileños “preferían el dinero a la salud de la gente”. Una imputación de enorme gravedad, me parece a mí.

Bueno, pues resulta que las tornas han cambiado. Y ahora está siendo el gobierno regional de Madrid, y los de otras comunidades, el que ha reclamado al Ejecutivo que implante el confinamiento domiciliario, como medida extrema para frenar la desbocada marcha del Covid. Y es el Gobierno de la nación el que se resiste.

Andalucía, Asturias, Castilla y León y Murcia han pedido un segundo confinamiento domiciliario en sus autonomías, y los gobiernos de Extremadura y Castilla-La Mancha no descartan estudiar esta medida para frenar la tercera ola de contagios. La Rioja lo apoya, y ha reclamado a sus ciudadanos auto confinarse para evitar los contactos sociales.

Así pues, parece existir un clamor, al que el Gobierno de la nación hace oídos sordos.

Visto lo cual, no puedo menos de preguntar a los que, allá por el mes de mayo, descalificaban a la Comunidad de Madrid, si ahora mantienen el mismo enfoque de entonces.

 

Les planteo la cuestión más directamente. Con su negativa al confinamiento domiciliario, ¿el Gobierno de España apuesta por poner en riesgo la integridad de los ciudadanos, antes que perjudicar la actividad económica y empresarial?

Pedro Sánchez y sus ministros ¿prefieren la bolsa a la vida?

Daría un paso más. Teniendo en cuenta la tremenda situación que sufre hoy este país con la tercera ola del coronavirus, descontrolados los contagios y de nuevo con saturación en hospitales y UCIs, ¿era el momento de quitar al ministro de Sanidad?

¿Era adecuado prescindir de la persona que desde el principio ha comandado la lucha contra la pandemia, y que por tanto tendría que tener las experiencias y los datos, para enviarle como candidato a Cataluña, solo porque las encuestas le son favorables de cara a un buen resultado electoral?

¿Eso no puede interpretarse como que se opta por los votos, y no por el combate para librar a la población del azote del Covid-19? ¿Prefieren, en fin, los votos a la vida?

Ya sé que estoy yendo un poco lejos, para la pregunta puede ser hasta pertinente.

Más aún. Cuando se anunció la nominación de Salvador Illa en lugar de Miquel Iceta, no pude menos de pensar que, dados los enormes desafíos existentes, Pedro Sánchez optaría por situar al frente del ministerio vacante, el de Sanidad, el mejor candidato que exista en España para frenar la pandemia.

Tenía toda la lógica que buscara al más destacado especialista en luchar contra las epidemias. y que lo nombrara ministro. Pues no. Me equivocaba. Ha colocado a una persona que no tiene precisamente ese perfil. Ni de lejos.

Desde mi punto de vista, aquí sí. Aquí se ha preferido la política de partido a luchar de verdad contra la pandemia. Con los costes que eso nos supondrá a todos.

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