Moncloa lo sabe en dos minutos
Cuando Iván Redondo era el mandamás en La Moncloa, creo un equipo especial, una especie de fuerza de acción rápida, para actuar cuanto antes frente a cualquier noticia comprometedora, opinión precipitada o actuación peligrosa que pudiera afectar al presidente (sobre todo) y a su Gobierno.
Lo original no era que realizaran ese trabajo, sino lo mucho que madrugaban. Y lo rápido que reaccionaban.
Constituían una especie de brigadilla del amanecer, porque comenzaba su labor muy temprano. Objetivo: contrarrestar cuanto antes los in puts mediáticos, con el fin de que no tomaran cuerpo. Sobre todo en las redes sociales, siempre imprevisibles y hasta caóticas.
Esos apagafuegos de Moncloa actuaban como los buenos bomberos, que atacan las llamas en cuanto nacen, cuando el fuego todavía es controlable, evitando así que crezca y se convierta en imparable. Y, así, conseguían extinguir hogueras incluso antes de que se formaran.
Los procedimientos eran muy diversos. Por ejemplo, una rápida llamada telefónica a alguien, un periodista, un alto cargo de un medio, un compañero de partido... desde la propia Moncloa. Facilitar una ‘noticia’ que desmentía de hecho la anterior, o al menos la desautorizaba en parte. Incluso, en alguna ocasión, la emisión de un comunicado de desmentido desde Presidencia. Todo para frenar el incendio antes de que estallara.
Cuentan los que han trabajado en La Moncloa para evitar los incendios antes de que crecieran que aquello era una auténtica una obsesión de Iván Redondo. Pero que, de esa forma, ahorró no pocos disgustos (y desgastes) a Pedro Sánchez y al Gobierno.
El en su día todopoderoso ya no recorre los pasillos de Presidencia, no tiene despacho allí ni hilo directo con Pedro Sánchez, pero todo indica que su espíritu sigue presente.
Lo demuestra la noticia publicada por ECD.
Moncloa ha contratado por un año, y por 15.000 euros, a una compañía especializada que le suministra cualquier noticia sobre Pedro Sánchez que ofrezcan radios y televisiones... ¡solo dos minutos después de que se haya emitido. No sobre el Gobierno sino sobre el presidente.
De esa forma, completa el actual servicio de clipping (de recortes) que le entrega otra empresa, que recoge informaciones de prensa escrita (periódicos y digitales).
La empresa contratada ahora tiene una docena de personas en la escucha y visualización de televisiones y radios.
Por supuesto, no vigilan la totalidad de medios audiovisuales, sino que han identificado quince, los más punteros y por tanto más influyentes. Los demás, por lo visto, no son importantes.
Lo dicho. El espíritu de Iván Redondo sigue en La Moncloa
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