Luis Alfonso de Borbón, invitado por Sarkozy a la recepción a Benedicto XVI en el Elíseo y después a la Misa en los Inválidos
Luis Alfonso de Borbón y su esposa, Margarita Vargas, asistieron en primera línea a la recepción que se ofreció en el Palacio del Elíseo, sede de la Presidencia de la República Francesa, al Papa Benedicto XVI con ocasión de su llegada a París para la visita de cuatro días.
Según informaciones recogidas por Monarquía Confidencial (ver noticia), Luis Alfonso, duque de Anjou y descendiente directo de los Borbones franceses, fue invitado personalmente por Nicolas Sarkozy para asistir a la recepción. Junto con su esposa, entraron en el Eliseo en coche hasta el patio de honor.
Los duques de Anjou fueron situados en la primera fila de autoridades y personalidades, en la que figuraban el Gobierno, altas instituciones de Francia y autoridades eclesiásticas. A la recepción no fue invitado ningún representante de la Casa de Orleáns, que desde hace siglos disputa a la rama primogénita de los Borbones el trono francés.
Al terminar, Luis Alfonso de Borbón y su esposa pudieron saludar al presidente de Gobierno, François Fillon, así como a los ministros, con los que departieron amistosamente. No se produjo un encuentro con el Pontífice, porque Benedicto XVI, que llegaba cansado del viaje, se retiró muy pronto, acompañado de Sarkozy.
Durante esos intercambios, la ministra de Vivienda y Ciudad, Christine Boutin, dijo al duque de Anjou: “Gracias, monseñor, por lo que sois y lo que representáis”. Margarita Vargas causó muy buena impresión entre las personalidades presentes.
Los duques de Anjou asistieron igualmente, en lugar de honor, a la Misa que ofició Benedicto XVI en la explanada de los Inválidos, en primera fila, junto con los ministros y altas autoridades de Francia. En una posición posterior se encontraba Jean de Orleáns, duque de Vendome, y en una fila por detrás Charles Emmanuel de Borbón Parma.
