El dalai (Lama) que encandiló a todos… menos a Florentino

Manolo Lama (49 años) fue presentado el pasado martes como el ‘balón de oro’ de la COPE. No pasó inadvertida la presencia en ese acto del mismísimo presidente de la emisora, Fernando Giménez Barriocanal, y el consejero delegado, Rafael Pérez del Puerto, quienes defendieron esta operación como un “proyecto atractivo, viable y de futuro”.

Pero la llegada de Manolo Lama a la COPE ha ido precedida y acompañada de un gran número de movimientos y claves. Esas pistas permiten hacerse una idea de la verdadera dimensión de esta maniobra. Estos son los principales hitos de este fichaje, expuestos de forma sintética:

-- La implicación de Manolo Lama en el salto del equipo de Paco González y Pepe Domingo Castaño de la SER a la COPE ha sido total: desde un discreto segundo plano, él ha dado órdenes, ha diseñado equipos e intervino decisivamente en verano convenciendo personalmente a veteranos periodistas y colaboradores de la SER para que se decidieran a dar el salto.

-- Ha participado concretamente en dos hechos especialmente importantes. Intervino activamente en el fichaje de Xuancar, amigo personal e histórico directivo del Grupo Prisa en Canarias (donde quedaron muy dolidos por su marcha, al ser hombre de confianza de los Polanco), que cambió a Cebrián por la jefatura de Deportes en COPE, donde ya ejerce.

--Pero hay más. La complicidad de Manolo Lama con esta operación ha sido tal que en verano pidió expresamente a Paco González que prescindiera de Miguel Ángel Muñoz, el locutor que seguía al Real Madrid y a la Selección Española en la Cadena COPE, con José Antonio Abellán. Lama lo consideraba incompatible con él, por lo que (pensando en este desembarco suyo, que ahora tiene lugar) pidió a otro periodista para el arranque de la temporada, alguien que pudiera después quedarse a su lado. Por eso llegó Miguel Ángel Díaz desde Radio Marca.

-- Lama no se desvinculó antes de la SER fundamentalmente por dos motivos. En primer lugar, su contrato contenía una cláusula que le obligaba a abonar una cuantiosa indemnización a la Cadena SER en caso de cancelación unilateral del acuerdo un año antes de su fin. Algunas fuentes cifran en un millón de euros el importe de la sanción que debía haber abonado si se marchaba en agosto.

Pero además, Manolo Lama no quería perder el informativo de Cuatro. Y la empresa que hasta ahora era propietaria de la cadena (Sogecable/Prisa) no estaba dispuesta a permitir que su estrella interviniera a la vez en la COPE y en su telediario. La compra de Cuatro por parte de Mediaset cambió por completo el escenario. Paolo Vasile está encantado con Lama y con Manu Carreño y así se los hizo saber: hace unas semanas habló con ellos personalmente y les aseguró que serían “pieza clave” en el futuro. No estaba dispuesto a perderlos. Vía libre para compatibilizar radio y tele.

La ventana televisiva es muy importante para Manolo Lama. Supone un ‘plus’ de notoriedad para el periodista, que está convencido de que parte de su éxito e influencia se lo debe al poder de la imagen. Pero además, supone un suculento complemento para los ingresos mensuales que le reporta su trabajo en la radio. Aquí hay que incluir, además, la partida nada desdeñable que le corresponde por los anuncios que protagoniza.

-- La cuestión económica no es baladí. La Cadena SER ha intentado impedir la marcha de Lama. Hace unos meses, la dirección de la emisora le puso sobre la mesa un nuevo contrato para vincularse por otros cinco años con la SER (el que le quedaba y cuatro más). No ha trascendido el importe exacto de esa propuesta pero se habla de “un ofertón”.

-- No sólo Paolo Vasile o Paco González están encandilados con Manolo Lama. El propio director del diario Marca, Eduardo Inda, ha cambiado su percepción sobre el nuevo locutor de la COPE. Cuando el periódico de Unidad Editorial publicó en agosto que Manolo Lama formaría parte de ‘Tiempo de juego’, lo calificó de “prestigioso periodista”. Lo llamativo es que, sólo tres meses antes, Marca le había definido de manera muy diferente.

El rotativo de Unidad Editorial fue uno de los medios de comunicación más críticos con el periodista tras el polémico incidente con un mendigo, ocurrido en Hamburgo horas antes la celebración de la final de la Europa League que jugaba el Atlético de Madrid. Lama, explicaba en su día Marca, “humilla a un mendigo mientras que desde el estudio le ríe la gracia a su colega”. El diario calificó la actuación de “indignante, humillante y de pantomima”.

-- No todo es ‘buen rollo’ en el horizonte de Manolo Lama. El principal desencuentro del periodista no es pequeño: tiene como protagonista al mismísimo Florentino Pérez. La entrevista de ‘los Manolos’ en Cuatro en noviembre de 2009 desató las hostilidades. Lama se vio obligado a pedir disculpas públicamente por el tono hostil y agresivo que demostró con el presidente del Real Madrid y que se desató una oleada de indignación en Internet.

-- Hay quien habla incluso de una verdadera “obsesión con Florentino”. Lama se ha vanagloriado en privado de aquella dura entrevista en Cuatro insistiendo, cuando se le pregunta, en que tiene todo el derecho del mundo a criticar al presidente del Madrid. “¿Pero quién se cree? ¿Jesucristo?”, se le ha escuchado decir con displicencia.