El trasfondo de la paz firmada por la Cadena SER y COPE
La Cadena COPE y la SER anunciaron este viernes, discretamente y de mutuo acuerdo, la retirada de todas las demandas que cada una de estas empresas había planteado contra la otra y contra algunos de sus comunicadores.
La salida de los periodistas Paco González y Pepe Domingo Castaño de la Cadena SER en 2010 y su nuevo programa en la Cadena COPE propició un cruce de pleitos entre ambas emisoras en los tribunales.
¿Despido improcedente por parte de Prisa? ¿Ruptura unilateral del contrato por parte de los profesionales? ¿El formato de ‘Tiempo de juego’ es una copia de ‘Carrusel Deportivo’? Todo ha quedado en nada.
La decisión se ha presentado a la opinión pública como un éxito colectivo, un gesto donde no ha habido heridos, ni damnificados. Somos adultos y como tal debemos comportarnos: “respeto de las legítimas diferencias”, “colaboración al servicio del bien común”, evitar problemas añadidos “especialmente en este momento de crisis"…
Sin embargo, la decisión tiene un trasfondo innegable. A mi juicio, esta pipa de la paz sí que ha dejado vencedores y vencidos.
Augusto Delkader (presidente de la SER), José Ramón de la Morena (director de ‘El Larguero’) y Daniel Anido (ex director de la Cadena SER) han salido bastante tocados de este affaire.
Los tres interpretaron siempre la marcha de Paco González y Pepe Domingo Castaño a COPE como un gesto de hostilidad que no debía quedar sin respuesta. Los tres se declararon siempre firmes partidarios de seguir hasta el final y habían impuesto hasta ahora su criterio.
El caso del histórico Augusto Delkader es especialmente significativo. El pasado mes de octubre, el Grupo Prisa anunció que Delkader abandonaba cualquier función ejecutiva aún manteniendo la presidencia de la radio. Veinte años después, quedaba relegado a un puesto meramente honorífico… como ahora se acaba de demostrar.
Por el contrario, José Luis Sáinz (consejero delegado de Prisa Radio), Alejandro Nieto (director general), y Javier Pons (ahora fuera de la compañía) siempre admitieron errores en la gestión de esta crisis y repartieron las culpas, también entre los que en su casa se encargaron de llevar las negociaciones.
Además, las dos sentencias dictadas en primera instancia favorecieron a la Cadena COPE y a los periodistas. De ahí que Sáinz y Nieto insistieran: los procedimientos judiciales estaban restando credibilidad a la radio, desgastando la imagen de la emisora y favoreciendo a la competencia.
Finalmente, José Luis Sáinz y Nieto han recibido vía libre para cerrar el contencioso. Señal de que el consejo del Grupo Prisa apoya a ambos y confía en su criterio.
Más en twitter: @javierfumero
