6 Planes gratis para hacer en Corpa
Planes gratis para hacer en Corpa como visitar el pósito
- Palacio de los Marqueses de Mondéjar
- Iglesia Santo Domingo de Silos
- Pósito
- Ermita del Santísimo Cristo de la Piedad
- Fuente Grande
- Fuente Pequeña
Corpa, un municipio ubicado en las cercanías de Alcalá de Henares, se encuentra al sureste de esta ciudad, en la pintoresca campiña del Henares. Está a una distancia de 47 kilómetros del centro de Madrid y forma parte de la zona turística de la Alcarria de Alcalá.
Su extensión abarca 25,91 km². Rodeado por extensas llanuras dedicadas al cultivo de cereales y salpicado por diversos olivares, este municipio es conocido por sus fuentes y manantiales, cuya agua solía ser embotellada y enviada a Flandes.
Se cuenta que varios reyes, desde Felipe II hasta Carlos II, utilizaban esta agua para su consumo personal. Entre las fuentes más famosas se encuentran la Fuente Grande y la Fuente Pequeña. El municipio cuenta con un antiguo templo del siglo XII, la iglesia de Santo Domingo de Silos, que se erige como un importante símbolo religioso.
Asimismo, destaca el palacio del Marqués de Corpa o de Mondéjar, posiblemente construido en el último tercio del siglo XVI, como uno de los edificios más destacados de la localidad.
Palacio de los Marqueses de Mondéjar
El Palacio de Corpa, construido en el siglo XVII, posiblemente por orden del Primer Señor de Corpa, Don Mateo Ibáñez de Segovia, destaca por su arquitectura inspirada en los palacios de la corte madrileña. Su fachada presenta un diseño escenográfico que embellece la plaza, con un cuerpo central de dos alturas y dos torreones más altos en los extremos.
La entrada principal está enmarcada por columnas de orden toscano que sostienen el balcón del piso superior. Las ventanas se distribuyen simétricamente alrededor de la entrada, decoradas con sencillas molduras.
En las torres, se encuentran tres ventanas en cada cuerpo. La base del edificio está construida con piedra y permite adaptarse al desnivel de la Calle del Agua. El palacio cuenta con un gran patio en la parte posterior, que en su tiempo albergaba las dependencias de servicio y poseía impresionantes fuentes. La fachada posterior, aunque más sencilla, sigue el mismo esquema simétrico y número de vanos que la fachada principal.
El Palacio de Corpa, considerado impresionante para un municipio pequeño como este, fue construido por el señor de Corpa, quien tenía buenas relaciones con la corona y buscaba convertir la villa en un punto de referencia. Se cree que la obra fue dirigida por Juan Gómez de Mora, destacado arquitecto de la época y responsable de obras como la Plaza Mayor de Madrid.
Además de la piedra tallada del escudo de la familia de la Puente en el pórtico principal, se sabe que el palacio albergaba pinturas al óleo con retratos de la familia. Se menciona la existencia de grandes tinajas en la bodega, que debieron ser instaladas antes de la finalización del edificio debido a su tamaño.
También se relata la presencia de columnas de altura media en la salida al jardín, donde se encontraban esculturas de monos en piedra.
Después de ser vendido, el Palacio pasó a manos de particulares, lo que dificultó su mantenimiento. En los años 60, se utilizó como taller de confección y, en los años 80, fue compartido por 24 propietarios.
El edificio comenzó a deteriorarse y, para su conservación, se decidió enfoscar, cubriendo así la piedra original. Actualmente, el Palacio de los Marqueses de Mondéjar está siendo rehabilitado por un particular que adquirió el edificio. Poco a poco, se está devolviendo su esplendor a esta magnífica estructura, que forma parte del paisaje urbano y es motivo de orgullo para los habitantes de Corpa.
Iglesia Santo Domingo de Silos
En el siglo XII se construyó una iglesia románica en honor a Santo Domingo de Silos en la plaza de la Constitución. El templo, de una única nave con cuatro tramos, cuenta con arcos fajones de bóveda de yesería que cubren la nave y se apoyan en pilastras adosadas a los muros.
La entrada principal está al sur y está cubierta por un pórtico sostenido por pilastras de mampostería. Destaca una potente torre de mampostería en el sur del templo, con cabezas labradas en piedra en las esquinas. En el interior, una escalera de caracol permite acceder al campanario.
En el siglo XVII, se realizaron remodelaciones importantes, incluyendo la ampliación de las naves y la construcción de la torre. En ese momento, se le dio el nombre de "Toledillo" debido a las réplicas en miniatura de las campanas de la Catedral de Toledo. El cementerio se encontraba en la parte trasera de la iglesia y contaba con varios altares y una capilla particular.
La iglesia fue dotada de imágenes y pinturas, muchas de las cuales se perdieron durante la Guerra Civil. En 1889, se llevaron a cabo obras de restauración debido al deterioro de la nave. Después de la Guerra Civil, la iglesia sufrió daños significativos y tuvo que ser restaurada, reduciendo el tamaño de la nave y reconstruyendo el pórtico de entrada.
Pósito
En la plaza, desde el siglo XVI, se encuentra un edificio que en el pasado era de gran importancia pero que ahora pasa desapercibido. Es un edificio rectangular cubierto por una techumbre de madera a cuatro aguas con tejas árabes.
Construido sobre un zócalo de mampostería, presenta muros de ladrillo con sillería en las esquinas. En su fachada principal, se conserva un hueco formado por un arco de ladrillo utilizado para introducir el grano. Tres pequeños vanos en la parte alta de la fachada permitían la ventilación de las cámaras donde se almacenaba el cereal.
Este edificio tiene una función histórica relacionada con la subsistencia en la Edad Media. En aquella época, la alimentación en los pueblos se basaba principalmente en la agricultura y la ganadería, y el trueque comarcal era más común que la compra. Para garantizar el sustento de la población y prevenir la escasez y las hambrunas, los Reyes Católicos promulgaron leyes que requerían la existencia de edificios adecuados para almacenar alimentos básicos, como el trigo.
Estos edificios, llamados pósitos, abastecían a la comunidad en tiempos de escasez y prestaban grano a los agricultores para la siembra y el consumo durante los meses de mayor escasez, evitando así la usura.
Los pósitos eran administrados por los concejos municipales, que los custodiaban y gestionaban los fondos relacionados. Por lo tanto, era común que los pósitos y las alhóndigas (lugares donde los vendedores almacenaban su cereal) se ubicaran en edificios cercanos o adyacentes a las Casas Consistoriales, donde se reunían los miembros del concejo.
Estos edificios llegaron a ser uno de los principales activos de los municipios, ya que también cumplían funciones de crédito agrícola al otorgar préstamos a los campesinos. Su administración estaba bien regulada, y los escribanos del concejo registraban los movimientos de grano y los depósitos monetarios que se custodiaban en un arca de tres llaves, siempre presente en estos edificios.
Ermita del Santísimo Cristo de la Piedad
En el pasado, hasta el siglo XVIII, se hacían referencias a la Ermita de la Concepción, aunque no se sabe con certeza si estaba ubicada en el mismo lugar que la ermita actual. La ermita que conocemos fue construida en 1922 para reemplazar a la antigua ermita del Cristo.
Desafortunadamente, fue destruida durante la Guerra, pero fue reconstruida hace algunas décadas. El edificio tiene forma rectangular y está construido con sillarejo y sillares, con un tejado de dos aguas. Está situada cerca del cementerio, rodeada por una verja y un pequeño espacio no construido delimitado por esta verja.
En el interior de la ermita se encuentra una imagen del Santísimo Cristo de la Piedad, el patrón de Corpa. Unos días antes de la festividad en su honor, los vecinos se congregan en una ceremonia religiosa en el patio de la ermita. Luego, se realiza la "bajada del Cristo" en procesión hasta la Iglesia, marcando así el inicio de las festividades en honor al patrón.
Fuente Grande
Una de las fuentes más icónicas y hermosas de este municipio es un símbolo de su identidad, incluso aparece en nuestro escudo. Fue construida en 1897 por dos maestros canteros, como indica una placa conmemorativa. La fuente cuenta con un frente de mampostería de donde surgen tres caños que abastecen un amplio arca rectangular. En tiempos modernos se añadió un gran pilón a la derecha de la fuente, que solía utilizarse como lavadero.
En el pasado, las mujeres lavaban la ropa en el pilón de la fuente, mientras que el ganado bebía del abrevadero, ya que la zona era parte de la Cañada Real Segoviana. Las aguas de Corpa siempre han sido destacadas, mencionadas incluso por ilustres como Miguel de Cervantes en su obra "La ilustre fregona" en 1613. También se ha documentado el elogio de un médico, Alfonso Limón Montero, en 1697, sobre la excelente calidad del agua del pueblo.
La fuente solía ser un punto de encuentro para las mujeres que acudían al lavadero, vecinos que recogían agua fresca en cántaros cuando no había en las casas, y un lugar donde los jóvenes pasaban sus tardes charlando y riendo.
Hoy en día, sigue siendo un lugar de encuentro para niños y adultos, así como un punto de descanso y refrigerio para senderistas y ciclistas que se refrescan con el agua fresca de sus caños. La belleza de la fuente continúa atrayendo las miradas de todos los visitantes.
Fuente Pequeña
Existen referencias en textos del siglo XVIII que confirman la presencia de esta fuente. Su construcción en piedra caliza le otorga un aspecto rústico. Cuenta con un pequeño caño que vierte el agua en un alargado pilón, y desde allí fluye hacia un abrevadero más grande destinado al ganado.
