Colombianos, peruanos y mexicanos lideran las operaciones de extranjeros para la compra de viviendas de lujo en Madrid
Los inversores no españoles suponen ya el 30% de estas ventas inmobiliarias en la capital
La vivienda de lujo está viviendo un boom en Madrid. Desde que se levantaran las restricciones a la movilidad y se pusiera coto a la pandemia del coronavirus, los extranjeros quieren invertir en la capital.
Así lo constatan desde Barnes Madrid, la filial local del Grupo Barnes (una inmobiliaria especializada en los inmuebles de lujo). Los expertos de la empresa explican que actualmente el 30% de toda la demanda de inmuebles de lujo en la capital proviene de extranjeros, especialmente de Latinoamérica (colombianos, mexicanos y peruanos).
Esto, según Eduardo Crisenti, director de Barnes Madrid, es una querencia nueva. Hace ocho años, cuando él debutó en el sector inmobiliario, los foráneos constituían un porcentaje testimonial en cuanto a las compras de vivienda de lujo en la ciudad del oso y el madroño.
La tendencia cambió cuando los venezolanos empezaron a llegar a la capital. Ellos "abrieron camino para que el cliente latinoamericano viera el potencial de Madrid, y no sólo en cuanto a inversión, en las que la ciudad tiene mucho recorrido", explica Crisenti.
Madrid no sólo tiene precios que son mucho más baratos que los de París o Londres. También, los latinos encuentran en la capital de España un estilo de vida muy similar al de sus países en cuanto a cultura y gastronomía. Los extranjeros no compran la casa solamente como inversión, esperan convertirla en un futuro en su residencia, como explica el director de Barnes en Madrid.
Crecimiento vertiginoso
Durante el primer trimestre de 2021 se cerraron 17.917 operaciones de ventas en el sector inmobiliario residencial en Madrid, según datos de la agencia inmobiliaria Knight Frank y el Consejo General del Notariado. La cifra supone un aumento del 11,7% con respecto al mismo periodo del 2020.
La tendencia al alza en las ventas se ha disparado desde junio de 2021, como explican desde Barnes. Aún con la incertidumbre, la pandemia no ha hecho que disminuyan las ganas de comprar propiedades de lujo.
Crisenti revela que "se están manteniendo los precios" lo que es una sorpresa para los trabajadores del sector inmobiliario, ya que había temor de que debido a la crisis cayeran.
Debido a estos buenos datos y a la tendencia, desde Barnes calculan que el precio de la vivienda de lujo crecerá en torno a un 3% a final de año. Los analistas de Knight Frank secundan esta previsión y además auguran que aumentará un 6% durante 2022.
Zonas deseadas
Los precios han crecido especialmente en las zonas prime de la capital como el Barrio de Salamanca, Recoletos, Castellana, los Jerónimos y Almagro, donde la oferta es escasa y la demanda es alta, aún en pandemia. Los clientes extranjeros suelen llegar con recomendaciones de compra en estos lugares, resumen desde Barnes.
Dar salida a la demanda de vivienda en estos barrios es complejo. Crisenti hace autocrítica y señala que los profesionales inmobiliarios tienen "que ser más imaginativos a la hora de ofrecer propiedades", hay zonas como El Viso o Nueva España que sí que pueden tener inmuebles con las características demandadas y "son menos conocidas para el cliente internacional". El experto augura que estas nuevas zonas van a tener "un buen recorrido en los próximos meses".
Una ciudad de moda
La capital ha tomado ventaja sobre Barcelona, la cual también es una ciudad cosmopolita que también podría atraer al mismo tipo de clientes. Otro lugar de la Península cuyas viviendas de lujo también son atractivas para los extranjeros es la Costa del Sol, aunque el perfil de los compradores es totalmente diferente (más europeo).
“Madrid es un destino muy atractivo para la inversión en el sector inmobiliario residencial. La capital española es un moderno centro urbano, con una sociedad dinámica y con un carácter cosmopolita. Factores como sus conexiones internacionales o su creciente modernización en materia de movilidad sostenible y eficiencia energética acrecientan ese interés”, expone Carlos Zamora, socio de Knight Frank y responsable del Área Residencial.
