Negociación contrarreloj para aprobar un nuevo contrato por obra para el rodaje de películas, series y programas de televisión

La reforma laboral promovida por Yolanda Díaz y aprobada en febrero sufrirá próximamente una modificación. El Gobierno, con un equipo interministerial formado por responsables del Ministerio de Trabajo y Cultura, negocia a toda prisa con el sector cultural un nuevo contrato por obra y servicio que se adapte a las necesidades del sector.

La desaparición dentro de dos semanas de este tipo de modalidad contractual provocada por la reforma laboral ha puesto en tensión al sector de rodajes de películas, series y programas de televisión. Según explican fuentes sectoriales a Confidencial Digital, esta reforma administrativa “ponía en riesgo” producciones que se iban a empezar a grabar el mes que viene.

A su juicio, esta reforma obviaba “el carácter temporal” de los trabajos propios del sector de la cultura y el ocio, ya que tanto los rodajes de formatos audiovisuales como el sector de los espectáculos tienen “un inicio y un final” estipulados. En estas circunstancias, añadían, la ausencia de un contrato temporal podía perjudicar tanto a los productores como a los trabajadores.

El caso de los especialistas

Los afectados citan un ejemplo: si quieres grabar una película del Oeste, necesitas diez especialistas en equitación. Sin embargo, una vez que acabe la película, puede que no vuelvas a grabar nada para un western nunca más o durante años. De ahí que no tenga sentido tener a estos trabajadores contratados en plantilla: “no les puedes dar trabajo” de forma continua y la ausencia de una fórmula para contar con ellos les va a acabar “penalizando”.

Para estudiar un encaje de este tipo contractual de carácter temporal propio del sector cultural, se ha formado en las últimas semanas un grupo de trabajo integrado por directivos del sector y responsables de los Ministerios de Trabajo, de Hacienda y de Cultura.

Sobre la mesa está la propuesta y el compromiso de sacar adelante, antes del 31 de marzo, el marco jurídico más adecuado para que los rodajes de series de televisión, películas y programas de televisión, además de los espectáculos en vivo como el teatro o los musicales, puedan seguir contratando de manera temporal acogiéndose a un contrato específico.

Directivos del sector insisten a Confidencial Digital que la desaparición del contrato por obra “les ha puesto en riesgo”, también a los espectáculos teatrales, ya que una obra “no está ‘sine die’ en cartel”.

Contrato sólo para artistas y en mejores condiciones

Al parecer, las negociaciones van por buen camino. “Las representantes del Gobierno han sido muy receptivos” ante esta problemática, explican. Por ello, se han reunido en las últimas semanas con el objetivo de encontrar ese marco regulatorio que encaje con las necesidades de la industria.

A cambio de este nuevo marco, el sector cultural está dispuesto a aceptar que estas medidas solo se apliquen a trabajadores artísticos de cada compañía y la industria apueste por “una mayor profesionalización” del sector, que permitirá las mejoras de las condiciones de los trabajadores más vulnerables.

Concretamente, explican, se van a incluir “mejores seguros médicos y más amplios, con mayores coberturas”, “se va a meter en plantilla a todo el que sea susceptible de una mayor permanencia” y se va a permitir que cobren en mejores condiciones su cotización para el paro y para la jubilación.

Aunque todavía falta por detallar cual es el mejor enfoque jurídico definitivo del nuevo modelo contractual, una de las opciones que se está barajando es el futuro Estatuto del Artista que está preparando el Ministerio de Cultura de Miguel Iceta. Va a ser un paraguas legal que permitirá crear una modalidad de contratación específica.