Nuevo escándalo sobre la vista en el juzgado

La falsa retransmisión de la declaración de la infanta Cristina por la revista Mongolia

Inventó las preguntas del juez Castro y las respuestas que daba. Utilizó frases como “perdonad, pero en ocasiones se nos va la conexión con Palma” para darle mayor credibilidad

Uno de los tuits que lanzó la revista Mongolia durante la declaración de la infanta.
Uno de los tuits que lanzó la revista Mongolia durante la declaración de la infanta.

La retransmisión de la declaración de la infanta Cristina que ofreció en directo el sábado la revista Mongolia era falsa. Se ha descubierto ahora. Y con ello ha reavivado la polémica por la grabación de imágenes en los juzgados de Palma con una cámara oculta. Aunque Mongolia ha argumentado después que se trató de una broma, algunos medios de comunicación les acusan de ser los responsables de la grabación de la vista.

A pesar de que, en los días previos a la comparecencia, el juez Castro prohibió la grabación de sonido y de imágenes del interior de la sala durante la declaración de la infanta, no se ha conseguido impedir que el interrogatorio de doña Cristina se haya filtrado a los medios de comunicación. El diario El Mundo difundió a las pocas horas un vídeo de aproximadamente cinco minutos, en el que se podía apreciar la silueta de la infanta mientras respondía a las preguntas del juez.

Pero no ha sido el único escándalo en torno a la declaración de la infanta. La revista Mongolia fingió que estaba retransmitiendo en directo lo que ocurría en el interior de los juzgados de Palma de Mallorca. A través de la red social Twitter fue difundiendo mensajes aparentemente tomados de una conexión con la sala donde se estaba desarrollando la vista.

Con un guión

Para dar verosimilitud a lo que iba 'retransmitiendo', la revista insertó comentarios como “la declaración va con un poco de retraso porque la grabadora de audio no funciona bien”, o “Perdonad, pero en ocasiones se nos va la conexión con Palma y nos quedamos in albis”.

Según ha explicado posteriormente Gonzalo Boye, editor de la revista Mongolia: “Habíamos preparado un guión, desde una perspectiva jurídica, de todo lo que era previsible que le preguntasen a la infanta”. Con ese guión inventaron las preguntas que teóricamente iba haciendo el juez Castro y también las respuestas que daba la infanta Cristina.

Un ejemplo de algunos de los tuits que lanzaron a lo largo de la jornada:

1) Juez: ¿De dónde se pagaba el servicio doméstico?

Infanta: De la cuenta del banco.

2) Fiscal: ¿Cómo calificaría su amor y confianza hacia su esposo?

 

Infanta: Lo amo profundamente y confío en él. Siempre lo he hecho.

3) Juez: ¿Desconoce usted cualquier actividad de Aizoon?

Infanta: Ya he dicho que de eso se encargaba mi marido.

Reproducido en otros medios

Cuando se iniciaron las retransmisiones en los canales de televisión, la revista publicó en su cuenta oficial de Twitter: “hay un retraso por un problema de audio en la sala”.

Inmediatamente, algunos periodistas se hicieron eco y se le dio toda la credibilidad. El falso interrogatorio circulo para páginas webs, redes sociales...

Se creyó que Mongolia había infiltrado un dispositivo electrónico en los juzgados de Palma y que estaba relatando en tiempo real todo lo que iba sucediendo en su interior.

Incluso, algunos tertulianos han seguido todavía inmersos en la confusión. De hecho, uno de los colaboradores del programa 'El Cascabel al gato', que presenta Antonio Jiménez cada noche en 13tv, continuaba asegurando el lunes que Mongolia tuvo acceso directo a las respuestas de doña Cristina.

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