¿Puede un heredero renunciar a su parte en la Herencia?

El mundo de la trasmisión patrimonial en España es complejo. La ley marca unas pautas que afectan por igual a todos los ciudadanos y, a esto, hay que sumar las normativas propias de las comunidades autónomas relativas al impuesto de las herencias, las condiciones de acceso a las mismas, etc.

Bien se trate de una herencia sin testamento, o de un escenario en el que el fallecido sí haya realizado este documento, siempre habrá una figura que desempeñe el rol de heredero y al que le sean atribuidas las propiedades, patrimonio económico, etc.

En este punto, mucha gente se pregunta si la ley permite que un heredero pueda renunciar a su parte de la herencia. ¿Qué dice la ley al respecto? ¿En qué supuestos es recomendable renunciar a parte de la herencia? ¿Cómo es el proceso para que un heredero rechace la trasmisión patrimonial?

La posibilidad de renunciar a una herencia

La respuesta rápida a la pregunta de si puede un heredero renunciar a su parte en la herencia es: sí, puede.

Esta decisión es el primer paso de todo proceso de ejecución de una herencia. Una vez que la persona ha fallecido y se lee el documento de últimas voluntades para comprobar si hay testamento, se determinan los herederos. Estos tienen la posibilidad de renunciar a la herencia por el motivo que sea y sin necesidad de dar explicaciones.

Es importante señalar que esta es una decisión que no admite cambios a posteriori: una vez que la persona ha decidido repudiar o renunciar a la herencia, no podrá decidir que sí la quiere. Igual ocurre al contrario: si acepta la trasmisión patrimonial no es posible desdecirse en una segunda etapa.

Proceso para rechazar la herencia

La mayor parte de ocasiones la posibilidad de renuncia se pone sobre la mesa cuando este proceso va a dar más quebraderos de cabeza que otra cosa. Teniendo esto en cuenta —sumado al hecho de que la decisión es irrevocable—, se recomienda en primer lugar estudiar qué supone la herencia con un abogado para valorar los pros y los contras de aceptarla. Una vez tomada la determinación de renunciar, existen dos fórmulas:     

• Renuncia pura: la persona beneficiaria del legado no quiere recibir nada de la herencia y declara que no le importa dónde vaya a parar el patrimonio, que se atribuye al siguiente heredero natural según la ley.  
• Renuncia en beneficio de un tercero: en este caso, la renuncia se hace para que el patrimonio pase a otro heredero. En este caso, el beneficiario original del patrimonio tendrá que pagar un impuesto por heredar y otro por donar a la siguiente persona, si así lo establece la comunidad autónoma donde resida.

¿Por qué renunciar a una herencia?

¿Qué podría llevar a una persona a renunciar a una herencia? ¿Por qué negarse a recibir dinero o propiedades? Aunque parezca complicado, cada vez son más las personas que utilizan este recurso por algunos motivos como los señalados:    

• Deudas: la persona fallecida tenía más deudas que bienes y el heredero tendría que hacer frente a ellas. ·      
• Impuestos: el impuesto de sucesiones implicaría desembolsar una cantidad de dinero muy alta y la persona heredera no quiere tener que hacerlo.      
• Motivos personales: hijos que no tienen relación con sus padres, padres que renuncian a la herencia en favor de los viudos o viudas de sus hijos… Son muchos los escenarios que pueden entrar en este punto.

Estos son los principales datos a tener en cuenta en relación con la renuncia a una herencia sin testamento o con él. Conviene saber que esta posibilidad existe para utilizarla en casos en los que recibirlas no sea positivo desde el punto de vista económico o no resulte del gusto de los herederos establecidos por la ley.