Trufalia: herencia viva de una tradición familiar de más de 30 años

La trufa negra es uno de los superalimentos más exquisitos y gourmet que existen en la actualidad.  Con un sabor inigualable que no podemos encontrar en ningún otro alimento, esta variedad de hongos es un alimento exquisito que podemos utilizar para arroces, carnes, huevos, pasta, cremas y numerosas otras comidas.

El consumo de trufa en España no solo destaca por la calidad de este alimento, sino porque hablamos de un producto local. Con esto queremos decir que España es uno de los mayores productores de trufa de todo el mundo, siendo además la localidad de Sarrión, la capital de la trufa negra.

Con todo esto queremos hablarte en este artículo de Trufalia, la mejor tienda de trufas negras nacional en la que puedes comprar trufa fresca o en conserva tanto para uso particular como para restaurantes o caterings. A continuación, vamos a contarte cómo se cultiva y recolecta la trufa negra conforme a los estándares de estos profesionales.

¿Cómo trabajan los recolectores de Trufa negra?

La trufa negra que comercializan en Trufalia también se conoce con el nombre de Tuber melanosporum Vitt, es una variedad de trufa negra de primer nivel que tiene una calidad excepcional. Esta es la que se puede encontrar habitualmente en la comarca de Gúdar-Javalambre, ya que dentro del campo de las trufas negras existen distintos tipos, en función de la forma y el punto de maduración.

Siendo la tercera generación de expertos de recolección de trufas en Teruel, esta empresa familiar se posiciona como una de las empresas líderes en la venta de trufa negra melanosporum. Con un cultivo artesanal, en Trufalia realizan todos los procesos de recolección, clasificación y envasado de manera natural y a mano. Se lleva un seguimiento detallado para asegurar en todo momento la frescura y calidad del producto.

Cultivo de trufas

En Trufalia llevan a cabo un proceso de cultivo que nace directamente de los días del comienzo de la tradición de este negocio. Para ello, la familia cuenta con unos viveros propios, en los cuales crecen árboles micorrizados que después se trasplantan al campo. Es un proceso lento, pero que da sus frutos. El cuidado del terreno es uno de los factores más importantes para que estos árboles crezcan sanos.

Por ello, el trabajo del cultivo también pasa por un trabajo de mantenimiento continuo en el cual, para la obtención de las trufas a posteriori, es imprescindible poder quitar malas hierbas y asegurarse de que estos árboles micorrizados se encuentran en un buen estado. Todo el cultivo que se lleva a cabo por parte de Trufalia es de especies autóctonas, puesto que tienen como propósito conservar la riqueza vegetal de la zona a la que cultivan.

Gracias a esta responsabilidad social también se encargan de evitar la desertización y mejorar las características del suelo mediante un aporte continuo de nutrientes. De esta forma, hablamos de que la trufa negra que se produce en España en la actualidad se obtiene prácticamente de un cultivo controlado, y no de un entorno salvaje. Esto se hace precisamente para obtener la mejor calidad posible del producto y para asegurar una recolección cada año.

Recolección de la trufa negra

Si hablamos de la recolección propiamente dicha, tal y como nos cuentan de ese Trufalia, se lleva a cabo desde noviembre hasta marzo o abril, dependiendo de las características de cada temporada. Las trufas no tienen la capacidad de vivir por sí solas, ya que hablamos de hongos, de modo que funcionan mediante una asociación entre hongo y vegetal que se conoce como simbiosis; de ahí la importancia de los árboles micorrizados.

Es precisamente durante la unión entre las raíces del árbol con los hongos que nace el fruto: la trufa. Para poder recolectar la trufa se utilizan perros truferos entrenados, los cuales se encargan de detectar estos hongos mediante el olor que desprenden. Una vez que el perro localiza las trufas, el recolector es quien las extrae manualmente de la tierra.

Una vez que las trufas se han recolectado durante esta época de invierno, llega el momento de limpiarlas en profundidad, clasificarlas y envasarlas para poder proceder a los envíos. Desde trufalia se vende trufa fresca y trufa en conserva, y se utiliza la vía de transporte más rápida para que el cliente pueda tener la trufa con la mayor calidad y brevedad posible. De esa manera, en Trufalia te aseguran obtener tus trufas después de la compra en un periodo que nunca superará las cuarenta y ocho horas.

Por qué comprar trufas negras en Trufalia

Una vez que ya hemos entendido todo el proceso de cultivo y de recolección de la trufa negra por parte de Trufalia en sus campos en Gúdar-Javalambre, queremos hablar también de los motivos por los que son una empresa no solo con valores, sino también una calidad excelente en los productos.

● Tal y como hemos mencionado, Trufalia es una empresa familiar que recoge la tradición que inició el abuelo paterno de los actuales dueños de la empresa. Hablamos de una tradición de más de 30 años dedicada a la recolección y cultivo de la trufa negra. Es un producto local que busca cuidar y proteger nuestra tierra todo lo posible, por lo que apostar por Trufalia significa apostar por el comercio autóctono.

● La calidad de las trufas de Trufalia es insuperable.  Mediante todo el proceso que hemos comentado en los apartados anteriores, la frescura de extra trufa no tiene competencia. Nos encontramos ante un tipo de trufa negra de máxima calidad con un aroma y un sabor inconfundibles que te hará disfrutar al máximo de la gastronomía.

● Por si todo esto no fuese suficiente, el precio tan competitivo que encontramos al comprar trufas en Trufalia no lo vas a encontrar en ninguna otra parte. Además, aquí no hay ni intermediarios, simplemente se recolecta la trufa y una vez que se hace la compra se manda directamente al cliente para asegurar la máxima frescura del producto.

● En relación con el punto anterior, como ya hemos comentado, el envío es rapidísimo. La Trufa negra de Trufalia llega al cliente en uno o dos días para que estos puedan degustar este superalimento gourmet poco después de haberlo comprado.