Mariano Rajoy se ve con fuerzas para intentar gobernar una segunda legislatura. Cree que en 2014 se verán ya los resultados de sus medidas
El primer año de Gobierno de Mariano Rajoy ha sido más que intenso, con duros ajustes y medidas que han desgastado al PP. Sin embargo, el presidente se ve con fuerzas para ganar las elecciones y encabezar una segunda legislatura. Cree que en 2014 se verán los resultados de sus ajustes y que entonces su figura saldrá reforzada electoralmente.
Según ha sabido El Confidencial Digital, Mariano Rajoy ha confesado a su entorno más cercano que, incluso desde antes de llegar a La Moncloa, su idea siempre fue que un presidente de Gobierno necesita dos legislaturas para desarrollar un proyecto sólido y de futuro.
Por ese motivo, su idea es mantenerse al frente del Ejecutivo, no sólo los tres años que restan para las siguientes elecciones generales de 2015, sino también volver a presentarse como cabeza de lista del Partido Popular.
Su imagen y la del partido mejorarán en 2014
En esos planes de Mariano Rajoy influirá mucho la imagen que tengan entonces los votantes, de él mismo y de su partido, ya que sólo se presentaría a las urnas para volver a salir elegido presidente y continuar su proyecto político.
Pese al desgaste sufrido durante este primer año, debido a los recortes que el Gobierno se ha visto obligado a realizar para cumplir con los objetivos de déficit marcado por Bruselas, el presidente cree que esa percepción negativa, que continuará durante este 2013, acabará ya a mitad de legislatura.
El entorno de Rajoy explica que el presidente “tiene claro que aún le queda otro año muy duro al frente del Gobierno, pero calcula que, a mediados de 2014, se empezarán a ver los resultados de todas las medidas que se han adoptado hasta ahora, con un descenso del paro y la reactivación económica gracias a la concesión de créditos por parte de los bancos”.
En ese contexto de mejora, “Rajoy verá reforzada su figura justo un año antes de las generales, por lo que podrá empezar a diseñar nuevas medidas y un nuevo programa, menos restrictivo, para la siguiente legislatura”, añaden.
Las fuentes consultadas por ECD afirman que el presidente tiene la ‘espina’ de haber tenido que estar actuando ahora “a corto plazo”, y su deseo es “preparar un proyecto de consolidación para los próximos cuatro años”.
Si se ve desgastado, dará paso a Feijóo
A pesar de tener claro el calendario que desea cumplir en lo que queda de legislatura y en la siguiente, Mariano Rajoy está también dispuesto a dejar paso a otro candidato si no consigue frenar, en los próximos años, el desgaste que vienen padeciendo el PP y él mismo como presidente.
De producirse ese escenario negativo, el presidente ya tiene en mente la persona idónea para el relevo. Tal y como se explicó en estas páginas, el elegido por Mariano Rajoy será Alberto Núñez Feijóo.
El actual presidente de la Xunta es el dirigente autonómico mejor valorado por los votantes, y persona de la máxima confianza de Rajoy, quien no ha dudado en recurrir a él para pedirle consejo durante este primer año al frente del Gobierno.
Además, el carácter de Feijóo, conciliador y sin problemas con ningún otro barón del partido, le ha granjeado la simpatía de la plana mayor del PP, que le ve como uno de los valores de futuro del partido.
