Uno de los principales desafíos de los cuerpos policiales es lograr que los teléfonos que utilizan los ‘objetivos’ queden ‘fichados’ en SITEL, la red de escuchas más tecnológica y eficaz con que cuentan los servicios de seguridad. A partir de ahí, los seguimientos y grabaciones harán el resto.
El sistema que se utiliza para lograr identificar y fichar es el siguiente, según explican a El Confidencial Digital desde ámbitos de los servicios de seguridad:
-- El primer paso es, lógicamente, localizar al objetivo u objetivos.
-- A continuación, de lo que se trata es de ubicarse lo más cerca posible. Para ello, por ejemplo, se rodea discretamente su casa.
-- En ocasiones se han utilizado pisos vecinos al que ocupa el objetivo.
-- Con frecuencia, se hace siguiendo en coche al automóvil del presunto delincuente. La maniobra tiene algunos problemas, porque hay que acercar bastante el vehículo propio al del objetivo y existe riesgo de ser localizado.
-- Si el objetivo se encuentra en un lugar público, como cafeterías o centros comerciales, se establecen turnos de vigilancia.
-- En ese caso, el agente que tiene que detectar el teléfono va de paisano, disfrazado según la ocasión, y con un maletín en el que oculta el dispositivo electrónico que permite inhibir la cobertura de los teléfonos móviles e identificar el móvil del objetivo.
-- Una vez localizado su móvil, otros operativos se encargan de trazarlo y grabar las conversaciones.