El juez Ruz, instructor del ‘caso Faisán’, está seguro en el puesto. Sus servicios especiales fueron aprobados sin límite mientras Garzón no vuelva a la Audiencia Nacional
El Consejo General del Poder Judicial ha ‘blindado’ al juez Ruz al frente del juzgado de instrucción número 5 de la Audiencia Nacional. El magistrado continuará en el cargo sin necesidad de renovar sus servicios especiales, y con el objetivo de llegar hasta el final en la investigación del ‘chivatazo’ a ETA.
En junio de 2010, Pablo Ruz tomó el relevo de Baltasar Garzón y se convirtió en el nuevo instructor del juzgado número 5 de la Audiencia Nacional. Un mes antes, el Consejo General del Poder Judicial había decidido suspender de sus funciones a Garzón, con tres causas contra él en el Tribunal Supremo por las escuchas en el ‘Gürtel y dos presuntos delitos de prevaricación.
Una de las primeras medidas adoptadas por el juez Ruz fue la reapertura del ‘caso Faisán’, cuya investigación había sido cerrada por su antecesor en el cargo. El hallazgo de nuevas pruebas y los interrogatorios a la cúpula del ministerio del Interior han convertido este proceso en un argumento político del PP contra Alfredo Pérez Rubalcaba y José Luis Rodríguez Zapatero. Hasta tal punto, que algunas fuentes aseguraban que el puesto de Ruz podía estar en peligro.
Los defensores de esta hipótesis se apoyaban en el hecho de que Pablo Ruz se encuentra en comisión de servicio, que debe ser renovada seis meses después de haberse constituido. Al haberse cumplido los plazos, apuntaban a que el Gobierno podía presionar al CGPJ para apartar del caso al magistrado madrileño.
Sin embargo, según ha sabido El Confidencial Digital, el puesto del instructor del ‘caso Faisán’ no corre ningún tipo de peligro. Voces autorizadas del Consejo General del Poder Judicial han explicado que “el nombramiento de Ruz fue excepcional y por eso se han tomado medidas excepcionales que le van a permitir mantenerse en el cargo”.
Las citadas fuentes afirman que “en el acuerdo al que se llegó en junio se especificó que no sería necesario renovar los servicios especiales de Pablo Ruz a los seis meses”. La Comisión Permanente del CGPJ decidió que “no habrá otro juez el número 5 de la Audiencia Nacional hasta que Garzón quedara absuelto y pudiera regresar”.
Sobre las hipotéticas presiones por parte del Gobierno, los funcionarios de Justicia consultados por ECD se muestran tajantes: “No cabe dudar de la independencia del Consejo”.
Además, de haber existido necesidad de renovar la comisión de servicio, “se hubiera realizado de forma interna, prestando especial interés en el cumplimiento de plazos en los juicios y en el modo de actuar en los mismos”. Las mismas fuentes sostienen que “Ruz ha realizado una labor impecable y no hubiera habido ningún tipo de problema”.
