Abascal fuerza que Feijóo se retrate: “Si hay foto con Sánchez en Moncloa, también con Vox en Castilla y León”

Es una maniobra política para sacar al líder del PP de la equidistancia

El presidente nacional del PP, Alberto Núñez Feijóo (i) y el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez (d), durante su reunión en La Moncloa.

Santiago Abascal busca que Alberto Núñez Feijóo se retrate en la investidura de Alfonso Fernández Mañueco como presidente de Castilla y León. Vox presiona al líder del PP para que se haga la foto junto a su partido, después de no apoyar explícitamente ese acuerdo de gobierno, y del acercamiento a Pedro Sánchez en la reunión en Moncloa.

Hay que recordar que la consigna en el nuevo PP es evitar a toda costa algo parecido a la ‘foto de Colón’, y en concreto que se les vea junto a Vox. De ahí la consigna que Génova para la manifestación de agricultores del pasado 20 de marzo: no acercarse ni un milímetro a ellos. Se ha enviado a la organización este mensaje: “De Vox no se habla”.

La decisión estratégica es, pues, ignorar al partido de Santiago Abascal, por más que el PSOE insista en tratar de vincularles a la extrema derecha. El análisis de fondo es que el asunto Vox va a acompañar durante bastante tiempo a Núñez Feijóo, quien, sin embargo, ya ha dado muestras de galleguismo con lo aplicado en Castilla y León.

No figuró apoyando el pacto con Vox

El nuevo líder del PP otorgó su visto bueno al pacto de gobierno con Vox allí, autorizándolo a Alfonso Fernández Mañueco pero sin aparecer él. Y, de esa forma, puso en marcha una ‘prueba’ de nivel menor, autonómico, para intentar averiguar cómo podría verse en el futuro un pacto semejante a nivel nacional.

El experimento salió regular, porque el PP escuchó cómo sus colegas del Partido Popular Europeo condenaban la coalición con Vox, hablando de “capitulación” y de “triste incidente”.

Dio la cara Fernández Mañueco, diciendo que había sido una opción suya, tomada autónomamente, pero la realidad es que se trató de una decisión adoptada por Feijóo, abriendo así una vía de futuro: los acuerdos con Vox, que Pablo Casado no estaba dispuesto a recorrer.

Génova se revolvió frente a esas críticas, acusándoles de inmiscuirse en “asuntos de política nacional”, pero la censura quedó ahí. Y es un dato de cara al futuro.

Vox ha forzado el retraso de la investidura

Ahora, según ha podido saber Confidencial Digital por fuentes próximas a Vox, la maniobra del líder del partido, Santiago Abascal, busca que Núñez Feijóo se retrate y salga de la equidistancia.

Han estado dando largas hasta que el Congreso Extraordinario del pasado fin de semana encumbró a Alberto Núñez Feijóo como nuevo líder nacional del PP, algo que ha incomodado a los populares, que contaban con haber solemnizado la toma de posesión de Mañueco antes de que el dirigente gallego fuera proclamado presidente y evitarle así el desgaste por el acuerdo de gobierno con Vox nada más aterrizar en Génova.

 

Que se retrate y salga de la equidistancia

Finalmente, el pleno de investidura comenzará el próximo lunes, en plena Semana Santa, en las Cortes de Castilla y León.

Según las fuentes consultadas, Santiago Abascal va a forzar que Feijóo tenga que estrenarse en su nuevo cargo asumiendo en toda su extensión el “pacto de las dos derechas” sin poder desentenderse de él ni achacarlo a la herencia recibida.

Todo ello, además, después de la foto de este jueves en La Moncloa con Pedro Sánchez: “Feijóo tiene que decir de qué lado está. Si hay foto con Sánchez en Moncloa, también con Vox en Castilla y León”, insisten en el entorno de Abascal. Van a intensificar la ofensiva contra el líder del PP para forzarle a acudir a la sesión de investidura.

La presencia del presidente de Vox, a falta de confirmación, es más que probable, al representar el pacto de gobierno el inicio de un nuevo estadio político para la formación al tocar poder gubernamental por primera vez.

No obstante, el líder del PP no ha asegurado su asistencia. Feijóo ha dejado la puerta abierta a su presencia en las Cortes, aunque dependerá de la agenda. Ese día, el PP celebrará en Génova un segundo comité de la directiva nacional por la mañana, lo que le permitiría justificar su ausencia y, si eso, enviar a la secretaria general, Cuca Gamarra.

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