Feijóo no boicoteará los Presupuestos si incluyen una quita a la deuda valenciana
El PP dice públicamente que los rechazará en el Senado, pero da por hecho que saldrán adelante y por tanto negociará para favorecer a una de sus autonomías clave
- Quita de deuda a las autonomías
- Condición para los Presupuestos
- Favorecer a la Comunidad valenciana
- Mayor margen de maniobra
La batalla política por los Presupuestos Generales del Estado de 2024 ya está en marcha. El PP dio el primer golpe al anunciar que bloquearía en el Senado la aprobación de los objetivos de estabilidad (reparto del déficit entre los subsectores) paralizando así el proceso presupuestario. Pero ahora Alberto Núñez Feijóo se abre a negociar con el PSOE.
La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, respondió a los populares lanzando un órdago: si no aprueban los objetivos, las comunidades autónomas y los ayuntamientos tendrán que revisar sus presupuestos para ajustarlos aún más. Así se lo trasladó la vicepresidenta a los consejeros de Hacienda de las autonomías durante la reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera celebrada el pasado lunes.
Pese a ello, el PP mantiene públicamente la intención de tumbar en el Senado los objetivos de déficit del Gobierno, aunque esta decisión obligue a sus comunidades a hacer ajustes de gasto en las cuentas del próximo año.
Quita de deuda a las autonomías
Ahora, con Pedro Sánchez en la Moncloa y la mayoría de los territorios en manos del PP, fuentes de Génova no descartan dejar pasar el trámite en el Senado, pero bajo una serie de condiciones relacionadas con el poder regional.
Según ha podido saber Confidencial Digital por fuentes próximas a la dirección del PP, Núñez Feijóo se guarda un as en la manga: utilizar la propuesta de condonación de deuda que el propio PSOE ha pactado con ERC en el acuerdo de investidura de Pedro Sánchez para forzar a negociar al Gobierno y sacar rédito electoral.
Condición para los Presupuestos
Esta oferta es extensible al resto de comunidades, incluso aquellas que optaron por endeudarse en el exterior y no acudieron al Fondo de Liquidez Autonómica (FLA). Las fuentes consultadas aseguran que Génova maneja vincular la negociación de los Presupuestos a esa quita de deuda, que se negociará de forma bilateral con cada región.
Es una propuesta que en la dirección del PP ven complicada en medio del clima de crispación con el que se ha inaugurado la legislatura, pero Feijóo da por hecho que las cuentas van a salir adelante y forzará esa negociación para conseguir al menos favorecer a una de sus autonomías clave.
Favorecer a la Comunidad valenciana
Las fuentes a las que ha tenido acceso ECD explican que el motivo para abandonar el veto a los Presupuestos del Ejecutivo es proteger el beneficio con esa concesión para una deficitaria Comunidad Valencia gobernada por los populares con Vox.
La Comunidad Valenciana, con 48.344 millones de deuda es la segunda autonomía más endeudada tras Cataluña. El presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, ha asegurado en los últimos días que la financiación autonómica “no es una batalla de esgrima entre presidentes de autonomías” ni tampoco “una moneda de cambio”.
Ha señalado, no obstante, que va a tratar de combatir “el ninguneo permanente” del Gobierno central “sin extorsionar a nadie, ni romper nada, ni jugar en mesas oscuras”. Pero no ha aclarado si se va a acoger a una condonación de la deuda como la pactada con Cataluña.
Hace unos días, Fedea publicó un informe en el que colocaba también a Andalucía, gobernada por el PP y es la comunidad autónoma más poblada de España, como una de las regiones más beneficiadas por esta condonación de la deuda regional, además de Cataluña.
Mayor margen de maniobra
Otra de las propuestas del PP pasa precisamente por tener margen de maniobra en ese reparto de los objetivos de déficit entre las tres patas del Estado, la Administración General del Estado, las comunidades y las administraciones locales.
Aseguran que, si María Jesús Montero se pone en contacto con Génova, los populares propondrán un reparto beneficioso de la capacidad de gasto para el sector regional y local y que sea el Estado central quien asuma la mayor parte del déficit.
