Feijóo lo tiene decidido: dará paso a otros líderes del PP como Ayuso si no puede gobernar

1. "No estamos para que nos den tres oportunidades"
2. "Si no hay sitio para el centro, nos iremos"
3. Ayuso, la alternativa del PP 
4. Rajoy y Aznar, presidentes a la tercera
5. Objetivo: 160 escaños

Alberto Núñez Feijóo no duda. Después de las polémicas declaraciones del pasado mes de febrero, en las que insinuó que abandonaría el liderazgo del Partido Popular si no consigue ganar a Partido Socialista, en Génova inciden en el mensaje. "Si no gobernamos, nos iremos", señalan fuentes de la dirección popular. Pero, esta vez, van un paso más allá. "Si en España no hay sitio para el centro político y los ciudadanos nos dan ese mensaje, no esperaremos", apuntillan. Así, la cúpula del PP señala la vía de salida para aquellas opciones, dentro de la formación, que no tenga el modelo "centrista" de Feijóo.

"No estamos para que nos den tres oportunidades"

En el PP no trabajan a largo plazo. Quieren aprovechar la dinámica del Ejecutivo: la rebaja de la malversación, la derogación de la sedición, el caso Mediador, la ley del 'solo sí es sí', y se muestran convencidos de que obtendrán buenos resultados en las elecciones autonómicas y municipales del próximo 28 de mayo. Todo este caldo de cultivo lleva a la cúpula del partido a creer que Feijóo debe ser presidente a la primera, sin esperar a más oportunidades. El objetivo es ganar a Pedro Sánchez, actual presidente del Gobierno y líder de PSOE, en las generales que, previsiblemente, se celebrarán a finales de este año. "No hay alternativa", reiteran.

Con la ruta hacia La Moncloa marcada, desechan permanecer al frente del principal partido de la oposición si las urnas no permiten que Feijóo alcance la presidencia del país. "No vamos a esperar más oportunidades", sentencias fuentes de la dirección del PP.

"Si no hay sitio para el centro, nos iremos"

Desde el partido explican a ECD el porqué de esta decisión. "Si no gobernamos, los ciudadanos nos estarán diciendo que no hay sitio para el centro político en España", afirman fuentes de la zona noble de Génova. La actual dirección considera que la propuesta de Feijóo representa "el centro", "alejada de extremismos", apuntillan. De modo que, de no poder gobernar, lo considerarán como un rechazo a la moderación; es decir, al proyecto político propuesto por la actual dirección del PP. Por ello, deslizan que no solo ellos, sino que la moderación, como propuesta política, abandonará el liderazgo del partido para dar lugar a otras propuestas. 

De cumplirse esta hipótesis, habría dos candidaturas principales para coger las riendas del PP: el presidente andaluz, Juan Manuel Moreno Bonilla, y la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso. Sin embargo, el perfil de Bonilla es muy próximo al de Feijóo. De hecho, el dirigente gallego fichó a la mano derecha del presidente andaluz, Elías Bendodo, para incorporarlo a la primera plana del partido a nivel nacional como coordinador general del PP.

Ayuso, la alternativa del PP 

Génova entiende que, si Feijóo fracasa en su intento de ganar a Sánchez, no habrá lugar para una propuesta moderada. Por ello, las palabras de la dirección popular permiten intuir que abren la puerta a otros líderes del partido que no hagan del centro político su principal baza. La máxima aspirante en este perfil sería Ayuso, cuyo tirón electoral es indudable. Provocó la dimisión de toda la cúpula anterior del partido, con Pablo Casado y Teodoro García Egea al frente.

Meses antes ganó de forma aplastante las elecciones autonómicas en la región madrileña, rozando la mayoría absoluta y venciendo en todos los distritos de la Comunidad. La potencia electoral de Ayuso y su confrontación con el Gobierno de Pedro Sánchez la ha situado como una de las principales cabezas del PP.

Rajoy y Aznar, presidentes a la tercera

La actual dirección popular no quiere seguir el camino de los anteriores líderes del PP. José María Aznar, sucesor de Manuel Fraga (fundador de la formación) consiguió ser presidente del Ejecutivo después de dos derrotas electorales contra Felipe González: en 1989 y en 1992. Finalmente, salió vencedor en 1996. Del mismo modo, Mariano Rajoy, alcanzó La Moncloa en 2011 tras perder en los comicios de 2004 (tras el atentado de la banda terrorista ETA) y de 2008 frente al socialista José Luis Rodríguez Zapatero.

Estas tres oportunidades han marcado, por tanto, el límite de los dirigentes populares para conseguir la presidencia del Gobierno. Sin embargo, la actual directiva rechaza ese margen y apuesta toda su estrategia a una suela carta. La de los próximos comicios.

Objetivo: 160 escaños

Como ya adelantó ECD, el equipo de Feijóo ha marcado una clara hoja de ruta hasta las elecciones generales. Las encuestas que manejan sitúan al líder popular en casi 150 escaños, más de 20 por encima del PSOE. La dirección del PP confía en obtener un "Impacto de imagen positivo" en los comicios de mayo, donde solo gobiernan en dos de las doce autonomías que acuden a las urnas: la Comunidad de Madrid y Murcia; en ambas, tanto los sondeos publicados como los internos dan una victoria clara a los populares.

"Nosotros vamos a mantener nuestros gobiernos, el PSOE no puede decir lo mismo", afirman. Los barómetros señalan que el resto de regiones no tendrán un resultado tan claro. Los socialistas se juegan, en cambio, nueve Ejecutivos autonómicos. "El 28-M lanzaremos nueve penaltis a Sánchez. Todos irán al palo. Cuando esto pasa, lo normal es que algunos vayan fuera, pero alguno entre", explican. De confirmarse los pronósticos que realizan en el PP, consideran que una victoria electoral en mayo catapultaría a Feijóo hasta rozar los 160 diputados. "A 16 o 17 escaños de la mayoría absoluta, Vox no estará como para pedir entrar en el Gobierno", continúan. En el entorno de Feijóo rechazan de pleno la posibilidad de gobernar con Vox (aunque están abiertos a llegar a acuerdos externos) y dejan la pelota en el tejado de los socialistas si Feijóo consigue sumar más que toda la izquierda (PSOE, Unidas Podemos y Esquerra Republicana). "Tendrán que decidir si se abstienen y nos permiten gobernar en minoría o prefieren que Vox entre en escena", concluyen.