Las dos maniobras de ERC para impedir que Puigdemont vuelva a ser President
1) Ha conseguido retrasar la aprobación de la ley de amnistía. 2) Hacer coincidir las elecciones catalanas con las vascas antes del verano
- Una “lucha de egos”
- Retrasar la aprobación de la amnistía
- Adelanto de las catalanas a junio
- Impedir que Puigdemont sea president
- Podrá volver cuando se apruebe la amnistía
El PSOE registró, al límite y en solitario, en la tarde del lunes, la controvertida proposición de ley de amnistía ante los últimos recelos planteados por ERC. El líder de Esquerra, Oriol Junqueras, ha ‘empujado’ a los socialistas a esa maniobra para impedir que Carles Puigdemont vuelva a ser presidente de la Generalitat.
Este martes, tanto el PSOE como Sumar y otras formaciones que respaldarán la investidura de Sánchez, en el debate que empezará este miércoles y que culminará el jueves con la votación, se esforzaron en destacar que lo relevante no es quién firmó la proposición, sino que la norma saldrá adelante con 178 votos de hasta siete partidos y supondrá un paso más en la recuperación del clima político en Cataluña.
El secretario general de Junts, Jordi Turull, reconoció que desde el sector socialista del Gobierno se les pidió que no firmaran el texto con ellos para que ERC no se descolgara y esa razón fue por la que tampoco se sumaron al final los otros aliados.
Casi todos esos socios se quejaron de que el PSOE les remitiese el proyecto a última hora y casi sin tiempo para analizar un documento tan complejo. Pese a ello, todos estos partidos respaldarán con su voto la aprobación de la ley cuando llegue al Congreso.
Una “lucha de egos”
El portavoz del PSOE en el Congreso, Patxi López, ha sido en las últimas horas –como viene siendo habitual- más expeditivo que sus compañeros de partido, al restar relevancia al procedimiento formal utilizado para plasmar el proyecto: “Ya era el momento de presentarlo y no de marear más la perdiz”.
Sin embargo, miembros de la dirección del grupo parlamentario socialista reconocen a Confidencial Digital la verdadera razón de ERC para frenar la firma de la ley de amnistía: la “lucha de egos” recurrente entre las dos formaciones independentistas catalanas. En Ferraz admiten que tendrán que acostumbrarse a esa disputa durante toda la legislatura.
Retrasar la aprobación de la amnistía
El PSOE contaba con tramitar la ley de amnistía por el procedimiento de urgencia, lo que supone reducir los plazos a la mitad. Eso podía permitir que el texto aprobado se remitiese al Senado en menos de un mes. Hay que recordar que el fin del delito de sedición completó su tramitación parlamentaria en poco más de un mes por la vía exprés.
ERC ha argumentado que la necesidad de modificar el texto registrado este lunes en el Congreso responde a matices “técnicos” relacionados con las causas sobre Tsunami Democràtic y los CDR.
Pero con la maniobra de Esquerra, las fuentes socialistas consultadas por ECD estiman ahora un plazo de entre cuatro y cinco meses de tramitación hasta su aprobación definitiva, lo que lleva el calendario hasta el mes de mayo, teniendo en cuenta también el retraso que sumará en el Senado por la mayoría absoluta del PP.
Las previsiones apuntan entonces a que la ley podría ponerse en marcha, como pronto, a finales de primavera. Pero los jueces tendrán entonces todavía dos meses para aplicarla.
Adelanto de las catalanas a junio
Hay que recordar que las elecciones autonómicas catalanas, si no hay adelanto electoral, deben celebrarse en febrero de 2025. Los tiempos se acoplarían de esa manera a las necesidades de Junts, que podría rentabilizar electoralmente el “efecto Puigdemont”.
Las dudas planteadas ahora por ERC a la ley de amnistía han sido justificadas por el escaso tiempo que han tenido para analizar el texto y aseguran que son las únicas responsables de un cambio de planes de última hora y que provocó que los socialistas firmaran en solitario la norma.
Sin embargo, el retraso en la aprobación de la ley de amnistía esconde una segunda maniobra de Esquerra. El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, ha comenzado a barajar la fecha de junio de 2024 para adelantar las elecciones catalanas y hacerlas así coincidir con los comicios vascos y gallegos.
Impedir que Puigdemont sea president
El objetivo de ese adelanto electoral, además de poder vender cuanto antes los logros que ERC ha logrado arrancar ahora al PSOE, como el traspaso de Rodalies o la condonación de 15.000 millones de deuda a Cataluña, es impedir también que Puigdemont regrese a España ‘amnistiado’ con tiempo para poder presentarse como candidato a la Generalitat.
En ERC no se fían de que el expresident renuncie a presentarse, pese a que desde su entorno más cercano se ha trasladado recientemente que desea mantener su autoridad moral sobre el independentismo sin los costes de la gestión política del día a día.
Aseguran que pretende evitar también los riesgos que implica optar de nuevo al cargo. El CEO, el equivalente al CIS catalán, augura que, en caso de celebrarse ahora las elecciones autonómicas, JxCAT quedaría segundo o tercero. Y que, en todo caso, ganaría el PSC. Puigdemont se niega rotundamente a volver a la política catalana para quedar por detrás de Salvador Illa y ver cómo la Generalitat es gobernada por un tripartito de izquierda.
En cualquier caso, fuentes políticas catalanas no pasan por alto tampoco que Puigdemont se caracteriza por su “imprevisibilidad” y por sus “cambios de opinión sorpresivos”.
Podrá volver cuando se apruebe la amnistía
Preguntado por la posible vuelta de Puigdemont a España, el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, la ha supeditado este martes a la aprobación definitiva de la amnistía, lo que ha señalado que es “casi imposible” que se produzca este año.
En paralelo, el secretario general de Junts, Jordi Turull, también ha afirmado que el expresident podrá volver a Cataluña, pero en todo caso cuando la norma esté “en vigor”, y ha negado que tengan trazado ahora mismo un calendario al respecto.
