Los choques por el cara a cara Sánchez-Feijóo: el PSOE pide que sea en mesa y a puerta cerrada, el PP en atril y con público
Temperatura en el estudio por debajo de los 20 grados para evitar el sudor, si se celebra sentados ya está pactada la altura de las sillas, prohibidos los pinganillos…
- Moderadores que moderen
- El PSOE pide mesa y puerta cerrada
- El PP prefiere atril y con público
- La distancia entre los candidatos
- Temperatura y altura de las sillas
- Prohibidos los pinganillos
- La posición que ocupa cada candidato
- Habrá una “Sala del Tiempo”
- Del González-Aznar… al Rajoy-Sánchez
Los debates electorales cara a cara en televisión, entre los dos principales candidatos a La Moncloa, vuelven en la campaña del 23-J, con el enfrentamiento entre Pedro Sánchez y Alberto Núñez Feijóo, fijado para el día 10. En las negociaciones para pactar previamente hasta el menor de los detalles del encuentro, han surgido varios pulsos entre los equipos de ambos líderes.
Han pasado ocho años desde el último cara a cara en unas elecciones generales en España. Aquel debate a dos se celebró el 14 de diciembre de 2015, y enfrentó al entonces presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y al candidato Pedro Sánchez.
Moderadores que moderen
El enfrentamiento del próximo lunes, en Atresmedia, entre el jefe del Ejecutivo y Núñez Feijóo supone el regreso a un formato que no fue posible ni en la campaña de las elecciones del 28 de abril de 2019, ni en la repetición de noviembre de ese mismo año.
Ana Pastor y Vicente Vallés serán los encargados de conducir el cara a cara, que tendrá una duración aproximada de 100 minutos, según ha explicado el grupo de comunicación.
Lo moderarán con el objetivo de favorecer el debate entre los candidatos y de introducir los temas que, a criterio de los periodistas, interesan a la ciudadanía.
El PSOE pide mesa y puerta cerrada
Según ha podido conocer Confidencial Digital, por fuentes de PSOE y PP involucradas directamente en las negociaciones para los preparativos del cara a cara, los pulsos por el debate Sánchez-Feijóo se han centrado en que el equipo del presidente del Gobierno, liderado por su director de gabinete, Óscar López, ha reclamado que el debate se celebre con los protagonistas sentados en una mesa y a puerta cerrada.
Desde el PP se tiene en cuenta que, dada su estatura, la imagen de Sánchez sentado en una mesa traslada la sensación a la audiencia de que está “acorralando” a su contrincante, lo que puede favorecer que aparezca como vencedor de la contienda.
La petición de los socialistas, de que no haya público en el plató, como sí ocurrió en algunos de los últimos debates electorales celebrados en Atresmedia, busca -dicen las fuentes del PSOE- respetar escrupulosamente la neutralidad, evitado el riesgo de que se produzcan interrupciones o murmullos entre los asistentes, algo que en realidad no ocurrió en los que desarrollaron con espectadores.
El PP prefiere atril y con público
En el equipo de Alberto Núñez Feijóo, en el que destaca como negociador el Vicesecretario de Relaciones Institucionales, Esteban González Pons, prefieren que Sánchez y Feijóo se enfrenten cara a cara de pie, detrás de un atril, que es como el ex presidente de la Xunta de Galicia se vio más cómodo en los debates que ha celebrado en su autonomía.
No ponen problemas a que asista público en los estudios de Atresmedia donde se desarrollará el duelo dialéctico porque no temen que se produzcan abucheos ni cualquier otra alteración del debate.
La distancia entre los candidatos
Según las fuentes próximas a la negociación, a las que ha tenido acceso ECD, las posturas han avanzado en las últimas horas en la línea de que Sánchez y Feijóo se encuentren sentados en una mesa, frente a frente, para así favorecer el diálogo y la confrontación de ideas.
Uno de los motivos de disputa ha sido el tamaño de esa mesa. Atresmedia ha propuesto dejar algo más de 2 metros de distancia entre ambos candidatos. Se trata de una separación “intencionada”, según revelan a ECD fuentes del grupo mediático, para que haya sensación de cercanía entre los dos líderes.
Temperatura y altura de las sillas
Las fuentes consultadas confirman que ambos partidos han pactado ya que la temperatura en el estudio se mantenga por debajo de los 20 grados, con el fin de evitar el sudor en pleno mes de julio. Igualmente, hay acuerdo respecto a la altura de las sillas, y lo mismo sobre la presencia en el plató de un asesor por candidato (uno solo), con el que podrán hablar durante las pausas publicitarias, que serán por lo menos dos, para emitir publicidad.
La realización de Atresmedia ha dado garantías a PSOE y PP de que los planos individuales de cada uno serán similares, con fondos genéricos. Y se ha acordado que no se realicen planos cortos o perfiles.
Prohibidos los pinganillos
Pedro Sánchez y Alberto Núñez Feijóo no podrán acceder al plató con teléfonos móviles, tabletas, relojes inteligentes o cualquier otro dispositivo electrónico.
Y, como principal novedad, se ha prohibido de forma expresa esta vez la posibilidad de utilizar pinganillos más o menos ocultos, según confirman a ECD fuentes de ambos partidos.
Hay que recordar que la polémica de llevar pinganillo persiguió a Isabel Díaz Ayuso durante la campaña de las pasadas elecciones autonómicas del 28 de mayo. Varias veces se le vio llevándose la mano a la oreja tras alguna pregunta incómoda, o permaneciendo en dubitativo silencio antes de responder. La presidenta madrileña lo negó tajantemente.
La posición que ocupa cada candidato
La posición que va a ocupar cada candidato en el estudio, quién abre el turno de intervenciones y quién cierra el debate, se establecerá este miércoles, mediante un sorteo que se celebrará a partir de las 12:00 del mediodía.
Representantes del PSOE y PP asistirán a dicho sorteo para extraer las bolas que marcarán la posición y el orden de las intervenciones de los dos candidatos a la Presidencia del Gobierno. Sin embargo, ya se ha acordado previamente que Sánchez y Feijóo dispongan de un ‘minuto de oro’ sin interrupciones para cerrar el cara a cara.
Habrá una “Sala del Tiempo”
Para lograr un debate ágil y flexible pero también justo con el reparto del tiempo, un equipo de técnicos de baloncesto, oficiales de mesa de la ACB medirá las intervenciones desde la llamada “Sala del Tiempo”, según ha explicado Atresmedia este martes. Ese equipo no buscará la exactitud matemática, pero sí un equilibrio razonable.
Los tiempos de palabra de cada uno de los candidatos quedarán reflejados en una pantalla que ambos podrán ver desde su posición con facilidad. Además, sobre la marcha serán informados por los moderadores de si se están produciendo desequilibrios excesivos.
El objetivo principal de la “Sala del Tiempo” ser una herramienta de control, con el fin de equilibrar los tiempos de participación de los candidatos y evitar con ello grandes diferencias en el uso de la palabra. Buscando, no la exactitud matemática, sino la proporcionalidad.
Del González-Aznar… al Rajoy-Sánchez
La primera vez que dos candidatos a la presidencia del Gobierno se enfrentaron en un debate televisivo fue durante la campaña para las elecciones generales de 1993, con Felipe González y José María Aznar como protagonistas.
En los comicios del 20 de diciembre de 2015 se celebraron tres debates, convocados por distintos medios de comunicación, en algunos de los cuales participaron por primera vez los representantes de las dos nuevas formaciones emergentes: Ciudadanos y Podemos.
Entonces, el único cara a cara tuvo lugar el 14 de diciembre, con Manuel Campo Vidal como moderador, y con Rajoy y Sánchez a ambos lados de la mesa. Y es el último, hasta el que se celebrará el próximo lunes en los estudios de Atresmedia.
Aquel fue un debate muy bronco, con la corrupción como tema estrella, y donde se cruzaron acusaciones mutuas de mentir. “El presidente del Gobierno tiene que ser una persona decente y usted no lo es”, fue la frase de Sánchez que sacó a Rajoy de sus casillas. “Hasta aquí hemos llegado”, respondió el entonces líder del PP, quien, a su vez, tachó a su oponente de “ruin, mezquino, miserable y deleznable”.
