La Agencia Tributaria utilizará drones en toda España para perseguir a narcotraficantes y contrabandistas
Compra 31 aparatos, que repartirá por ocho dependencias regionales y la de Canarias. Comenzó a utilizarlos en el Campo de Gibraltar y en la frontera con Andorra
La Agencia Tributaria está decidida a perseguir a los narcotraficantes y contrabandistas por tierra, mar y aire. Y desde el aire ha llegado a la conclusión de que los drones son un medio idóneo para investigar y actuar contra las redes criminales.
En los últimos años, el Departamento de Aduanas e Impuestos Especiales, a través de la Dirección Adjunta de Vigilancia Aduanera, ha ido incorporando estos vehículos aéreos tripulados a distancia, y dotados con cámaras que permiten a los agentes disponer de una visión desde el cielo para vigilar actividades ilegales.
Vigilancia Aduanera introdujo en 2017 un dron para complementar desde el aire las inspecciones que realizaba con furgonetas escáner en dos puntos fronterizos especialmente calientes: la Verja entre La Línea de la Concepción (Cádiz) y Gibraltar, y la frontera con Andorra en Seo de Urgel (Lérida), dos lugares por los que entran tabaco y otros productos de contrabando, así como en ocasiones cargamentos de droga.
Dos años después, incorporó otros cinco aparatos específicamente dedicados al Campo de Gibraltar. En esa zona de Cádiz, la lucha contra las redes de narcotráfico y contrabando lleva años enquistada, y se vuelcan numerosos recursos para combatir a estas organizaciones.
También la Guardia Civil adquirió drones para ganar capacidad de vigilancia desde el aire en sus dispositivos contra los narcotraficantes en la comarca del Campo de Gibraltar.
Con nuevas compras, la Dirección Adjunta de Vigilancia Aduanera ha ido aumentando el uso de drones en estas misiones, ya más allá del entorno de Gibraltar y de Andorra.
Extender el uso de drones por España
La Agencia Tributaria ha formalizado recientemente un contrato de “Suministro de 31 unidades UAS [drones] con sus accesorios para la Dirección Adjunta de Vigilancia Aduanera del Departamento de Aduanas e Impuestos Especiales”, con la empresa Aeromedia UAV SL.
El coste total del contrato para las arcas públicas roza los 100.000 euros.
En los documentos de la licitación, se explica que “la Dirección Adjunta de Vigilancia Aduanera ya cuenta con sistemas de estas características y pilotos formados, llevando a cabo labores de apoyo con estos aparatos allá donde son requeridos, siendo necesario extrapolar con carácter paulatino estas experiencias a nivel nacional”.
Vigilancia Aduanera decidió “iniciar la puesta en marcha paulatina de unidades especializadas de vigilancia de corto radio en las diferentes Dependencias Regionales” que tiene distribuidas por España, y para ello “se necesita aumentar el stock de estos medios para labores de investigación en la prevención del contrabando, narcotráfico, y fraude fiscal y aduanero”.
Los 31 drones que va a incorporar son de tres tipos: 14 del modelo “DJI Mavic 3 Thermal Enterprise, 15 DJI Mini 3 Fly More Combo con mando DJI RC, y dos DJI Avata para “vuelos interiores”.
Se repartirán por nueve dependencias regionales de Vigilancia Aduanera: ocho en la Península (no se indica dónde concretamente), más la de las Islas Canarias.
“El material del presente contrato irá destinado a reforzar las unidades actuales y al despliegue de esta tecnología en diferentes Dependencias Regionales, en funciones de las necesidades operativas”, se indica en la documentación.
Más baratos y más seguros
Destaca la Agencia Tributaria que “el Departamento de Aduanas e Impuestos Especiales, a través de la Dirección Adjunta de Vigilancia Aduanera, desarrolla su actividad en la lucha contra el contrabando, narcotráfico, el blanqueo de capitales y el fraude fiscal a través de diversas líneas de actuación, entre las que sobresale la vigilancia aeronaval, tanto por los medios materiales y humanos dedicados a ella como por la importancia de los resultados obtenidos”.
Esta unidad lleva años utilizando medios aéreos, al principio aviones y helicópteros. Como se ha explicado, hace unos años decidió complementar esa labor con drones, que presentaban “numerosas ventajas”, como un coste de adquisición y operación mucho más reducido, y la seguridad en caso de accidente, al no existir tripulación a bordo.
Vigilancias discretas
La Dirección Adjunta de Vigilancia Aduanera se muestra muy satisfecha del uso de los drones, una tecnología que “tiene una aplicabilidad directa a las actividades” de este cuerpo “en muchas de sus vertientes”, por lo que tiene en marcha varias iniciativas para potenciar su uso.
Una de esas vertientes es la vigilancia de corto radio, esto es, “la que tiene lugar con aparatos eléctricos multi-rotores que vuelan a distancia visual del piloto, cuyas misiones son, principalmente, para labores de investigación puntuales, protección y cobertura de la fuerza, y realización de vigilancias discretas”.
Destaca Vigilancia Aduanera que “los aparatos usados para estas labores son de precio reducido, sencillos de usar, y con unos requisitos de formación al alcance de cualquier organización similar, como son las policías locales, policía nacional, bomberos, etc.”.
Los drones que se adquieren son aparatos multirrotor, eléctricos, de distintos modelos y características, con capacidad de ser desplegados “con rapidez y facilidad para operaciones donde el tamaño y el tiempo de despliegue sean factores críticos, contando con sensores elementales, o en otros casos se da prioridad a capacidades de zoom en visión diurna y con posibilidad de sensor térmico para operaciones nocturnas”.
La idea es que ya no sólo en algunas zonas localizadas, sino por toda España se desplieguen drones “para contribuir a la prevención, disuasión, detección y represión del contrabando, narcotráfico y fraude fiscal”.
