El puñetazo de Feijóo a Pedro Sánchez
Alberto Núñez Feijóo no se arrepiente de haber arremetido tan crudamente contra Pedro Sánchez en el Pleno del Congreso del miércoles, cuando planteó al presidente del Gobierno estas preguntas: “Pero, ¿con quién está viviendo usted. ¿De qué prostíbulos ha vivido usted?”.
No se arrepiente. Más bien todo lo contrario.
Ese día, el líder del PP sacó al conocimiento general, y desde un lugar como la tribuna de la Cámara, algo que era manejado en los ámbitos políticos y periodísticos pero que no había visto la luz públicamente: la financiación del matrimonio Sánchez-Gómez, de su vivienda (y ahora se habla también de la campaña de las primarias socialistas), con dinero procedente de las saunas y prostíbulos de Sabiniano Gómez, padre de Begoña y suegro de Pedro.
Le acusó de ser “partícipe a título lucrativo del abominable negocio de la prostitución”.
Una especie de ‘venganza’, porque con ello reproducía la expresión que figura en la sentencia del ‘caso Gürtel’, que condenó al Partido Popular por ser “partícipe a título lucrativo” de la trama corrupta, si bien el Supremo precisó que no cometió delito de corrupción.
El líder del PP llevaba meses planteándose si utilizar políticamente la financiación de los Sánchez con dinero procedente de saunas y prostíbulos.
Le animó a hacerlo, primeramente, conocer la decisión, adoptada en el Comité Federal del PSOE, de reformar sus estatutos con el fin de que sean expulsados del partido quienes recurran a la prostitución. Quienes paguen por obtener sexo. Siendo así que esa lacra aparece de forma escandalosa en los comportamientos del trío corrupto, del trío tóxico, formado por Cerdán, Ábalos y Koldo. Y no solo ellos.
El empujón definitivo se produjo cuando, durante el Pleno, Sánchez acusó a Feijóo de haber medrado en el PP a base de tapar la corrupción. Pero sobre todo lo motivó la alusión al traficante de drogas Marcial Dorado, “el tipo con el que usted veraneaba, iba a paraísos fiscales y salía a navegar los fines de semana”.
“Ha tenido usted el cuajo de compararse conmigo”, comenzó Feijóo su respuesta. Y a continuación lanzó lo del dinero de las saunas y prostíbulos del suegro Sabiniano.
Antes de hacerlo, había reclamado a su equipo garantías de que podía afirmar, sin riesgo a equivocarse, que había existido esa financiación a la pareja Sánchez-Gómez. Y, entre otras cosas, la presentaron los documentos que demuestran que la vivienda en Madrid fue financiada desde la empresa del suegro.
Además de haberle llamado “político sucio” y otras lindezas, desde el campo socialista la acusación contra Feijóo se resume en decir que ha cruzado una ‘raya roja’ que nunca se había atravesado: la de involucrar a los familiares (mujer, marido, hermanos, padres...) en la batalla política.
En el PP recuerdan que Sánchez acusó en el Congreso a la mujer de Feijóo de haber recibido dinero de una empresa gallega, sin olvidar las acusaciones contra el hermano, el padre, el compañero de Isabel Díez Ayuso, etc., etc.
Feijóo no solamente no se arrepiente, sino que se muestra encantado. Porque esa intervención ha galvanizado al partido, que está protagonizando un cierre de filas en torno a su presidente. “Hemos dado un puñetazo en la mesa”, comentaban no pocos diputados. Y otro puñetazo, político por supuesto, en el rostro de Pedro Sánchez.
Un dato más. En el Pleno, Pedro Sánchez se abstuvo de responder a su rival sobre saunas y prostíbulos. Durante sus réplicas, lo ignoró absolutamente. Como si el asunto no hubiera salido en el debate.
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