“Otoño caliente” en Telemadrid: los sindicatos darán la batalla para la reclasificación de categorías e intentar dañar a Esperanza Aguirre

El convenio colectivo vigente en Telemadrid desde 2004 contempla la necesidad de alcanzar un acuerdo durante la duración del mismo para la reclasificación de las categorías profesionales dentro de la cadena autonómica madrileña.   Las negociaciones se han llevado a cabo durante estos años hasta que se alcanzó la fecha del 31 de marzo, prevista como aquella en la que debía estar cerrado un principio de acuerdo. Al no haberse alcanzado el consenso por discrepancias entre el comité y la dirección, se dictó una prórroga extraordinaria de tres meses para intentar encontrar una solución.   El nuevo plazo fijado terminaba el pasado 30 de junio, pero para entonces ya estaba claro que el acuerdo no llegaría por las dificultades surgidas en la negociación. Durante esta ronda se celebraron reuniones diarias entre los representantes de los trabajadores y la Empresa, sin ningún éxito. Por este motivo, se ha dado por cerrada la negociación.   Según ha podido saber El Confidencial Digital por fuentes de la cadena que dirige Manuel Soriano, lo que Telemadrid pretende ahora es que en la negociación del próximo convenio colectivo -antes de diciembre de 2007- se incluya una fórmula que solucione la polémica reclasificación de categorías.   ECD también ha podido saber que el descontento entre los representantes de los trabajadores es muy grande. Al parecer, su deseo sería extender el enfrentamiento hasta fechas próximas a las elecciones autonómicas de 2007 y así “negociar” con el daño de imagen que le podría causar a Esperanza Aguirre las posibles protestas y movilizaciones.   La dirección de Telemadrid no va a esperar más ni parece dispuesto a dejar dilatar más las cosas. De ahí que se espere un “otoño caliente” de protestas por parte de los sindicatos representados en el comité de empresa.   Fuentes oficiales de la cadena afirman señalan que “se han limitado a cumplir el convenio vigente”, y aducen que adecuar al gusto de todos los profesionales las nuevas categorías que deben entrar en vigor en sustitución de las obsoletas, es una tarea de gran dificultad.