Una veintena de aspirantes al GEO resiste tras superar la fase más dura del curso
El periodo de formación y selección se extiende durante siete meses. Comenzaron en enero 119 alumnos, incluida una inspectora, y se registraron 80 bajas en las dos primeras semanas
- Fueron convocados 119
- Más de 80 bajas en dos semanas
- Se estabiliza: resiste una veintena
- Menos ‘aprobados’ que plazas convocadas
El actual curso de acceso al GEO de la Policía Nacional ha superado los tres meses. La dureza de la formación en la base de la unidad de élite, en Guadalajara, ha provocado que sólo quede una veintena de alumnos, cuando fueron más de un centenar los que fueron convocados para empezar en el mes de enero.
Fuentes policiales consultadas por Confidencial Digital revelan esa cifra, en torno a los 20 aproximadamente, como el número de alumnos que resisten aún en el XXIII Curso de Especialización de Acceso al Grupo Especial de Operaciones.
Quedan aún casi cuatro meses de curso. Pero las fuentes consultadas apuntan que el gran corte se da al principio, cuando los instructores del curso “dan mucha caña” física, pero que también pone a prueba la resistencia psicológica de los aspirantes.
Fueron convocados 119
Tal y como se contó en estas páginas, a la base del GEO en Guadalajara estaban citados el lunes 8 de enero a las 7:30 los alumnos del Curso de Especialización de Acceso al Grupo Especial de Operaciones de la Policía Nacional, en la edición número 32.
Estaban convocados 119 miembros de la Policía Nacional, que habían superado las pruebas de ingreso previas en las que se selecciona a los aspirantes a superar este curso, a través de que se accede a la unidad de élite del cuerpo.
Entre los 119 seleccionados para comenzar el curso había una mujer, una inspectora de la Policía Nacional.
Aún ninguna mujer ha realizado y superado el curso, por lo que no hay mujeres en el GEO.
Más de 80 bajas en dos semanas
El inicio fue muy duro, hasta el punto de que provocó la baja del 69% de los alumnos antes de completarse las dos primeras semanas de formación.
En torno al 18 de enero ya sólo quedaban 36 alumnos, es decir, que se habían producido 83 bajas, o lo que es lo mismo, casi 7 de cada 10 aspirantes a ingresar en el Grupo Especial de Operaciones.
La tendencia desde hace unos años es que el curso empieza con un nivel de exigencia, sobre todo física, muy elevado.
Luego más adelante el curso se va suavizando, pero “la primera semana es a cara de perro”.
Se estabiliza: resiste una veintena
Esos 36 alumnos se habían reducido a unos 20 la primera semana de abril, de acuerdo con los datos facilitados por fuentes conocedoras de cómo está transcurriendo el curso.
Por tanto, la cifra se ha estabilizado en los más de dos meses que han transcurrido desde el 18 de enero. Han continuado las bajas, pero ya como un goteo y no como exclusiones “en masa”, las de las primeras semanas en las que fueron apartados más de 80 policías.
Las fuentes consultadas por ECD explican que las primeras semanas, como se ha dicho, son eminentemente físicas.
Pero conforme pasan las semanas y meses, en la formación de los futuros agentes del GEO se van introduciendo sesiones de adiestramiento en otros aspectos, como táctica, armamento, buceo...
Eso permite “suavizar” la dureza del curso y supone una mayor variedad en las actividades, que ya no se reducen a sucesiones de ejercicios físicos de una gran exigencia.
Aún quedan por delante meses del curso, que termina en torno a julio-agosto.
Quienes conocen las condiciones de los policías que resisten en el XXIII Curso de Especialización de Acceso al Grupo Especial de Operaciones aseguran que estos alumnos han llegado “muy fuertes” al curso.
Junto a la dureza de los ejercicios físicos, tuvieron también que superar semanas de mucho frío en el entorno en el que se adiestran, en su base de Guadalajara en algunos parajes naturales de los alrededores.
Menos ‘aprobados’ que plazas convocadas
Como se ha indicado, las bajas en el curso son ya más puntuales, por goteo. Habrá que ver cuántos logran llegar al final y acceder al Grupo Especial de Operaciones.
El País reveló el año pasado que, aunque se habían convocado 17 plazas de acceso, sólo 12 policías consiguieron completar el curso para entrar al GEO.
La Policía detalla en su web que “las operaciones en las que interviene el GEO son aquellas que otros miembros de la Policía Nacional no pueden realizar debido a su alta peligrosidad o en las que se exige una especial cualificación”.
Se recurre a esta unidad de élite en situaciones como:
-- Liberación de personas secuestradas o tomadas como rehenes.
-- Reducción o neutralización de los integrantes de bandas terroristas, grupos armados o delincuentes peligrosos.
-- Apertura y entrada en los lugares utilizados por los componentes de bandas terroristas y de grupos de delincuencia organizada.
-- Ejecutar los dispositivos de protección de personas y bienes que se les encomienden y precisen una especial cualificación.
-- Prestar servicio de seguridad en las sedes de las representaciones diplomáticas y consulares de España en el extranjero, cuando se considere oportuno.
-- Reconocimientos subacuáticos tendentes a la búsqueda de víctimas, artefactos explosivos o cualquier otro efecto utilizado para la comisión de un hecho delictivo.
-- Realizar cualquier servicio cuya ejecución precise una especial cualificación.
Según la Policía Nacional, “estas operaciones se justifican por el efecto disuasorio, intimidatorio y resolutivo de los integrantes de la unidad, reduciendo el riesgo al mínimo ante una posible respuesta de los delincuentes”.
