El Banco Santander se suma al Bizum para adolescentes bajo control parental
BBVA, ING y Bankinter ya han incorporado el sistema que permite a los padres fijar límites de gasto, recibir notificaciones y desactivar el servicio
- Una herramienta masiva
- Cuentas adaptadas para menores
- Crecimiento acelerado entre adolescentes
- De la paga a las emergencias
- Un servicio ligado al móvil
- Educación financiera desde pequeños
- Productos gratuitos y con incentivos
Con este paso, el banco más grande de España por volumen de activos se une a la estrategia de captar clientes jóvenes mediante productos bancarios adaptados a menores de edad, un segmento en el que ya competían BBVA, ING, Bankinter, Imagin, Kutxabank, Cajamar, Cajasur y Globalcaja.
Una herramienta masiva
Con 29,5 millones de usuarios activos y más de 4.000 millones de transacciones realizadas, Bizum se ha consolidado como la opción preferida para pagos inmediatos entre particulares en España. Y poco a poco ha ido abriéndose camino entre los más jóvenes.
La idea es sencilla: permitir que los adolescentes tengan acceso a un medio de pago digital bajo la supervisión de sus padres, con límites de gasto reducidos y la posibilidad de que los tutores reciban notificaciones en tiempo real o incluso desactiven el servicio.
Cuentas adaptadas para menores
La fórmula consiste en cuentas corrientes sin comisiones dirigidas a adolescentes, que incluyen tarjeta de débito, acceso a una app personalizada y la posibilidad de pagar con el móvil. ING, por ejemplo, acaba de estrenar una cuenta para jóvenes de entre 14 y 17 años, que replica los servicios básicos de un adulto pero con control parental.
En la mayoría de entidades, el acceso a Bizum para menores se activa a partir de los 12 o 14 años, dependiendo de la política de cada banco.
Los límites son más bajos que los habituales en adultos: BBVA e ING fijan un máximo de 50 euros por operación, mientras que Bankinter eleva el tope a 200 euros, aunque los padres pueden establecer límites diarios, semanales o mensuales.
Crecimiento acelerado entre adolescentes
El interés es creciente. Solo en 2023, más de 76.000 menores se dieron de alta en Bizum a través de BBVA, con 1,5 millones de transacciones realizadas. En el caso de Imagin, la filial digital de CaixaBank, los jóvenes han efectuado más de 4,2 millones de envíos desde que se habilitó la opción en marzo de 2024.
Según explican desde el comparador financiero HelpMyCash, el objetivo de las entidades es claro: fidelizar a los futuros clientes. Aunque las cuentas figuren a nombre del adulto, es el menor quien opera, siempre con el visto bueno y la vigilancia de sus tutores.
De la paga a las emergencias
El atractivo de esta herramienta no se limita a la modernidad. Según HelpMyCash, tiene una utilidad práctica inmediata: “Los padres pueden enviarle a sus hijos la paga por Bizum, así no tienen que darle efectivo y si un día el menor tiene una emergencia y necesita dinero rápidamente, por ejemplo, para coger un taxi, sus padres pueden hacérselo llegar en unos segundos”.
En el caso de ING, los tutores pueden monitorizar la cuenta, la tarjeta y el Bizum del menor, recibiendo notificaciones con cada movimiento. En BBVA ocurre lo mismo: los padres reciben alertas cuando su hijo envía dinero y pueden desactivar el servicio a voluntad.
Un servicio ligado al móvil
Para utilizar Bizum, los adolescentes necesitan descargar la app del banco, adaptada a su edad y con operativa muy limitada. Esto exige que tengan teléfono propio. Y las cifras acompañan: según el estudio Móviles en España 2025 de TBS Education, el 70% de los niños de 10 a 15 años en España ya dispone de móvil.
El porcentaje se dispara con la edad. A los 12 años, más de dos tercios tienen uno (69%), y a los 15 años la cifra asciende al 96%. Esta realidad facilita la expansión de servicios como Bizum, que requieren un smartphone para funcionar.
Educación financiera desde pequeños
Los expertos ven un valor añadido en estas cuentas: acercar a los menores a la educación financiera. “Las cuentas para niños cada vez se parecen más a las de los adultos, lo que les permite aprender a relacionarse con los bancos desde pequeños”, destacan en HelpMyCash.
La clave está en la supervisión: los padres deben vigilar la actividad, enseñar a administrar el dinero y marcar límites claros. De esta manera, la experiencia no se limita al uso tecnológico, sino que introduce conceptos básicos de gestión financiera personal.
Productos gratuitos y con incentivos
Por lo general, las cuentas para menores son gratuitas. No hay comisiones de mantenimiento, ni costes por emitir tarjeta ni por el uso de Bizum. Este modelo ha generado una competencia creciente entre entidades, que buscan diferenciarse con incentivos.
Algunos bancos han apostado por ofertas llamativas. BBVA, por ejemplo, regala 30 euros a los menores de 0 a 17 añosque abran una cuenta, en plena vuelta al cole.