Moncloa apartó a Bolaños de la exhumación de Primo de Rivera para evitar una rebelión de Podemos

El ministro iba a acudir al Valle de los Caídos y el socio de Gobierno le advirtió de que saldrían contra él para que no se colgara la medalla: “Sin nosotros, el PSOE no lo hubiera hecho”

Varios coches fúnebres entran al Valle de Cuelgamuros.
Varios coches fúnebres entran al Valle de Cuelgamuros.
  1. La exhumación de José Antonio
  2. Se barajó la presencia de Bolaños
  3. Rebajar el perfil de las autoridades políticas
  4. Se quiso “evitar un acto de campaña electoral”
  5. Evitar una rebelión de Podemos
  6. Bajo la supervisión de Bolaños
  7. Frustrar un plan de Moncloa
  8. Una exhumación televisada
  9. No llegó al traslado de Queipo de Llano
  10. Ningún partido puede atribuirse el logro
El coche fúnebre con los restos de José Antonio Primo de Rivera llegan al cementerio sacramental de San Isidro.
Moncloa apartó a Bolaños de la exhumación de Primo de Rivera para evitar una rebelión de Podemos.

El Gobierno contempló que Félix Bolaños, ministro de Presidencia y responsable de Memoria Democrática, acudiera este lunes al Valle de los Caídos para la exhumación de José Antonio Primo de Rivera. Pero su presencia se descartó finalmente para evitar las acusaciones de electoralismo, especialmente del socio Podemos, por colgarse la medalla.

Una vez que el Gobierno (entonces monocolor del PSOE) sacó del Valle de los Caídos los restos mortales de Francisco Franco, en octubre de 2019, su siguiente compromiso en materia de “Memoria Histórica” fue potenciar los trabajos de localización de fosas y excavación para identificar y exhumar a fallecidos en la Guerra Civil y en la represión posterior a la contienda que llevó a cabo la dictadura.

La ley de Memoria Democrática modificó el estatuto del Valle de los Caídos, una obra –se dijo- “faraónica” impulsada y ejecutada durante el franquismo “para exaltar la dictadura” y acoger los restos de víctimas de la Guerra Civil, “que ahora pasa a denominarse Valle de Cuelgamuros y queda resignificado como un lugar de memoria democrática”.

La exhumación de José Antonio

El Ejecutivo de Pedro Sánchez tuvo que incluir en la nueva norma un punto específico para la exhumación de José Antonio Primo de Rivera, ya que con el texto del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero la cuestión no era sencilla: al contrario de lo que sucedía con Franco, el fundador de Falange sí es “víctima” de la Guerra Civil.

Por lo tanto, su caso resultaba legalmente más complicado. De hecho, la intención original no era sacar a José Antonio del Valle de los Caídos, sino reubicarlo en un lugar “no preeminente”, lejos del altar de la Basílica.

Se barajó la presencia de Bolaños

Pues bien. Según ha podido saber Confidencial Digital por fuentes conocedoras de los preparativos de la exhumación, Moncloa se planteó la presencia del ministro de Presidencia, Félix Bolaños, responsable en el Gobierno de los asuntos de Memoria Democrática.

Algunos medios llegaron a dar por hecha al menos la asistencia de Bolaños, puesto que ha actuado como portavoz del Ejecutivo en este asunto y ha coordinado todos los trabajos.

Además, el PSOE ha calificado la jornada como “histórica” y recuerdan que se trata de una promesa personal de Pedro Sánchez. De hecho, fue una de las primeras medidas a las que se comprometió nada más llegar a La Moncloa tras la moción de censura, en junio de 2018.

Desde entonces, el equipo más cercano al presidente del Gobierno, entre los que se encuentra el titular de Presidencia, le ha dedicado muchas horas a intentar, por varias vías, que los restos, primero de Franco, y después de José Antonio, pudieran ser exhumados.

 

Rebajar el perfil de las autoridades políticas

Pese a ello, ECD ha podido confirmar, por fuentes de la Secretaría de Estado de Comunicación, que Moncloa decidió finalmente rebajar el perfil de las autoridades políticas que acudieron este lunes a la explanada del Valle de los Caídos.

La primera medida: que el ministro de Presidencia no saliera en esa foto a dos semanas de las elecciones. El Gobierno ha tratado, a través del propio Bolaños, trasladar el mensaje de que la exhumación iba a alejarse del comienzo de la campaña electoral, que arranca el próximo 12 de mayo.

Se quiso “evitar un acto de campaña electoral”

Moncloa valoró que la presencia de Félix Bolaños en el Valle de los Caídos convertiría la retirada de los restos de Primo de Rivera en el “primer acto de la campaña electoral” y es una puesta en escena que se ha propuesto evitar a toda costa.

Ha llegado a la conclusión de que las acusaciones de electoralismo podrían perjudicar aún más las expectativas del PSOE en las elecciones del 28 de mayo. Tampoco se olvida que utilizar electoralmente este asunto podría provocar un tirón de orejas por parte de la Junta Electoral Central.

Evitar una rebelión de Podemos

Por si esto fuera poco, en el equipo de Sánchez también reconocen a ECD que “no se quiso encender en exceso a Podemos”. El socio de Gobierno le había advertido de que saldrían contra él para que no se colgara la medalla: “Sin nosotros, el PSOE no lo hubiera hecho”.

La exhumación de José Antonio es un hecho histórico que apoya el partido morado, pero no comparte la manera en que lo está llevando a cabo el PSOE. “Nos parece claro que es una medida electoralista”, critican en privado diputados del grupo parlamentario de Unidas Podemos.

Se tiene en cuenta que los socialistas, con la retirada de Franco y Primo de Rivera del Valle de los Caídos, arrebatan una bandera a Unidas Podemos, como es la de la Memoria Histórica, uno de los pilares del discurso del partido morado.

De ahí que la formación que lidera Ione Belarra busque marcar distancias con el PSOE y aferrarse a otros elementos con los que criticar la actuación de Sánchez.

“El Gobierno no tiene que hacer ninguna celebración porque el PSOE llega 40 años tarde a esta cuestión. Si a alguien tenemos que agradecerle que Franco y José Antonio vayan a salir es a las asociaciones de memoria que llevan tanto tiempo trabajando”, reprochan a los socialistas cargos de Podemos.

Bajo la supervisión de Bolaños

Hay que recordar que fue la primera ocasión en la que se expuso a los focos el ahora ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, que acaba de impulsar la Ley de Memoria Democrática con la que se iba a proceder al traslado de los restos de José Antonio.

Si bien el expediente de exhumación lo tramitó el Ministerio de Justicia, concretamente la subsecretaria Cristina Latorre, por encargo de la entonces ministra Dolores Delgado, la ex vicepresidenta primera, Carmen Calvo, y Bolaños se encargaron en persona de pilotar y supervisar todo el proceso, así como de mantener interlocución directa con los descendientes de Franco y con otros actores implicados en la exhumación.

Es más, Bolaños tuvo un gran protagonismo en televisión el día que se abrió la tumba de Franco, el 24 de octubre de 2019, ya que él, la ex ministra Delgado, y el entonces subsecretario de Presidencia, Antonio J. Hidalgo, fueron los tres representantes del Gobierno que asistieron a la exhumación de los restos mortales del dictador.

Bolaños viajó incluso en el helicóptero que trasladó a Mingorrubio el féretro de Francisco Franco, que no perdió de vista en ningún momento.

Frustrar un plan de Moncloa

En esta ocasión, tal y cómo se contó en ECD el pasado mes de octubre, los descendientes del fundador de Falange movieron ficha rápidamente para impedir una exhumación ‘a lo Franco’, televisada, y en vísperas de las generales.

La familia recibió información entonces de que Moncloa había comenzado a confeccionar para los restos de Primo de Rivera un plan similar al que llevó a cabo con Francisco Franco, o cuando menos darle relevancia pública. Es decir: cobertura mediática.

Los Primo de Rivera no han estado dispuestos, bajo ningún concepto, a regalar este “show televisado” a Pedro Sánchez, que pretendía “enfrentar a los españoles en pleno año electoral”.

Una exhumación televisada

Hay que destacar que el traslado de los restos del dictador fue seguido por medios de todo el mundo, tanto en el punto de partida (Valle de los Caídos) como en el de llegada (cementerio de Mingorrubio). Hay que recordar que la retransmisión tuvo lugar el 24 de octubre de 2019, apenas unas semanas antes de las elecciones generales del 10 de noviembre, y la emisión supuso uno de los grandes despliegues de la televisión española, en particular la pública.

TVE utilizó 22 cámaras para emitir el momento en el que salió el féretro de la basílica, que fue portado a hombros por los familiares del dictador, hasta el despegue del helicóptero con destino al cementerio de Mingorrubio, en El Pardo.

La cadena pública ofreció la señal institucional al resto de medios. Este acontecimiento fue el contenido principal de los programas de las diferentes cadenas durante varios días. Solo el entierro se llevó a cabo en la más estricta intimidad familiar.

No llegó al traslado de Queipo de Llano

Sin embargo, Bolaños ya no pudo apuntarse la exhumación de Queipo de Llano. El ministro de Presidencia agradeció en su momento, “muy mucho”, a la Hermandad de la Macarena la “rapidez” con la que procedió a la exhumación de los restos mortales de Gonzalo Queipo de Llano de la Basílica de la Macarena (Sevilla) en cumplimiento de la Ley de Memoria Democrática. Sólo dos semanas después de su entrada en vigor.

Sin embargo, pese a que desde su ministerio se realizaron sugerencias y recomendaciones a la hermandad para llevar a cabo la operación, la familia de Queipo de Llano no avisó en última instancia al Gobierno del día exacto de la exhumación, que se realizó con discreción y de madrugada.

Una decisión que impidió la presencia de algún representante del Ejecutivo en el traslado. Y del propio Bolaños que, tal y cómo se contó en ese momento en ECD, “le hubiera encantado hacerse la foto”.

Ningún partido puede atribuirse el logro

El propio Pablo Iglesias ha calificado el traslado del fundador de Falange como una “buena noticia”, pero ha advertido de que ningún partido podía atribuírselo como un logro democrático.

Ha apelado a la figura de ‘Billy el Niño’ y las medallas pensionadas que le concedió el Gobierno como una de las asignaturas que quedan pendientes. “Debe recordar que en este país vivieron torturadores que están cobrando una pensión extra por haber torturado a gente que luchó por traernos la democracia”.

Hay que recordar que hace unos meses Pedro Sánchez aseguró que una de las cosas por las que pasará a la historia es por haber exhumado a Francisco Franco de un gran monumento como el que construyó en el Valle de los Caídos.

Moncloa apartó a Bolaños de la exhumación de Primo de Rivera para evitar una rebelión de Podemos.

Video del día

Detenida en Madrid una kamikaze borracha y
con un kilo de cocaína en el maletero
Comentarios
Envíanos tus noticias
Si conoces o tienes alguna pista en relación con una noticia, no dudes en hacérnosla llegar a través de cualquiera de las siguientes vías. Si así lo desea, tu identidad permanecerá en el anonimato