La nueva estrategia de Yolanda Díaz: busca protagonismo para recuperar el liderazgo que le ha ‘robado’ Irene Montero
La vicepresidenta concluye que la “sobreactuación” de la ministra de Igualdad estos meses la ha lanzado como candidata alternativa por la izquierda
El estallido del escándalo de la ley del “sólo sí es sí” ha marcado un punto de inflexión para Irene Montero. Desde que comenzó la polémica, se ha convertido en una de las protagonistas de la actualidad. Ahora, la nueva estrategia de Yolanda Díaz es buscar protagonismo para recuperar el liderazgo que le ha ‘robado’ la ministra de Igualdad.
Según admiten a Confidencial Digital fuentes próximas a la vicepresidenta, la líder de Sumar, enfrentada a Podemos desde hace semanas, asume que ha ido perdiendo influencia.
En un primer momento, Díaz buscó alejarse de la polémica cuando comenzaron a conocerse las primeras reducciones de pena de violadores por la ley del “solo sí es sí”. Pero ahora, casi un mes después, desde su entorno ven la necesidad de recuperar el protagonismo perdido y volver al foco de la actualidad.
Yolanda Díaz busca protagonismo
Según las fuentes consultadas, la nueva estrategia de la líder de Sumar es buscar protagonismo. De ahí, por ejemplo, la defensa de medidas populares que ha protagonizado en los últimos días como la congelación de las cuotas de las hipotecas y la limitación de precio de una serie de alimentos básicos de la cesta de la compra.
En su equipo están convencidos de que estas dos batallas volverán a “impulsar” a Yolanda Díaz y a su estrategia marcada por un discurso político que, añaden, “apuesta por la negociación evitando la crispación política”.
También hay que sumar la estrategia de Díaz de tratar de llevar la voz cantante de la parte de Podemos en el Gobierno en su respuesta al anuncio de Pedro Sánchez de reformar el delito de malversación, con la ya ha avanzado que no está de acuerdo.
El encontronazo con los empresarios
Detrás de esta estrategia de volver a lucir, admiten, se encuentra asimismo el tono beligerante contra la patronal, hasta el punto de que se ha propuesto convertir ese enfrentamiento en un discurso diferenciador, con el que pretende abrirse el espacio político que busca reconquistar.
El grado de malestar es tal entre los empresarios, que han decidido romper toda negociación con el Ministerio de Trabajo, y más concretamente con la vicepresidenta segunda, hasta que no rectifique y retire la enmienda transaccional que incluyó este martes en la Ley de Empleo que permite a la Inspección de Trabajo controlar los despidos colectivos al poder determinar si un ERE se ajusta a la causa alegada.
Este bloqueo en la negociación pone en riesgo acuerdos tan relevantes como la nueva subida del salario mínimo para 2023, que Díaz pretendía negociar en los próximos días ya que debe aprobarse antes de que termine el año, y el Estatuto del Becario, que está pendiente de que el ministerio presente un nuevo texto con las reivindicaciones de la patronal.
Por si esto fuera poco, esta actitud enturbia aún más la negociación clave que está en marcha sobre la segunda fase de la reforma de las pensiones, que debe cerrarse en estos últimos quince días de año y cuyo acuerdo, si ya parecía casi imposible, se complica aún más.
Irene Montero le ha ‘robado’ el liderazgo
En el equipo de Yolanda Díaz reconocen a ECD que Irene Montero ha conseguido ‘robarle’ a la vicepresidenta el liderazgo simbólico del espacio morado, autoproclamándose víctima de “violencia política” en el Congreso.
La titular de Igualdad volvió a ocupar todos los titulares días después, tras acusar al PP de promover “la cultura de la violación”.
Candidata alternativa por la izquierda
Tampoco pasan por alto que la actualidad ha convertido a Montero en noticia permanente por diferentes temas, y esa circunstancia ha sido aprovechada por su entorno para dar pasos adelante en la consolidación de su liderazgo y, sobre todo, en su potenciación como posible alternativa a Díaz.
Hasta el punto de que, tal y cómo se reveló hace unas semanas en ECD, Irene Montero ha logrado el apoyo de ERC y Bildu para reventar la ‘operación Yolanda Díaz’. La vicepresidenta les había convencido de que, sin renunciar a sus siglas y a presentar listas propias, trabajaran para que ‘Sumar’ tuviera el liderazgo a nivel nacional
La ministra de Igualdad lleva semanas siendo protagonista por las rebajas de condenas a agresores sexuales por la ley del “sólo sí es sí”, pero ha logrado sacudirse parte de ese desgaste después de que recibiera un ataque personal y machista de Vox. Una oportunidad que aprovechó rápidamente el partido morado, que montó un acto de reafirmación de Montero apenas unos días después para erigirla en referente feminista.
‘Lanzada’ tras los ataques de Vox
En Podemos subrayan que los “ataques” la han “reforzado”, de igual modo que le han permitido exprimir un tono duro e impugnador para presentarse como antagonista de PP y Vox. Entre tanto, potencia a su vez su liderazgo en la confrontación con el PSOE a cuenta de temas como la ‘Ley Trans’.
En el equipo de la vicepresidenta también dan por hecho que Irene Montero está preparándose para ser candidata a las elecciones generales ante la distancia abismal que ahora mismo separa a la cúpula del partido de Yolanda Díaz.
Su entorno comienza a asumir como “muy probable” el escenario de que no se pueda alcanzar un acuerdo que satisfaga las expectativas de los dirigentes morados y que eso tiene visos de acabar en una ruptura y una lista propia.
