Renfe diseña un ‘gran hermano’ para maquinistas tras el accidente de Santiago: cámaras de videovigilancia en las cabinas de los trenes y controles psicofísicos antes del servicio

Medidas sin precedentes en España para evitar otra tragedia como la del Alvia accidentado en Santiago. Fomento y Renfe planean instalar cámaras de videovigilancia en las cabinas de los trenes y someter a los maquinistas a controles psicofísicos aleatorios antes de iniciar un viaje.

Según ha sabido El Confidencial Digital por fuentes del sector ferroviario, técnicos del departamento que dirige Ana Pastor y de Renfe están diseñando el modo de implantar ambas medidas con las aportaciones realizadas en los grupos de trabajo conjuntos que han creado tras el accidente del Alvia en el que murieron 79 personas.

Vigilar las imprudencias de los maquinistas

Las fuentes a las que ha tenido acceso ECD explican que con la grabación de la actividad profesional de los maquinistas se busca vigilar sus comportamientos en la cabina durante la conducción, pero también sancionar las imprudencias que pudieran cometer.

En el caso, por ejemplo, de Francisco José Garzón Amo, el conductor del Alvia siniestrado en Santiago el pasado 24 de julio, él mismo reconoció en su declaración ante el juez haber cometido una imprudencia.

Según los datos obtenidos por la investigación de las cajas negras del tren, el maquinista del tren mantuvo una conversación con su teléfono móvil corporativo con el interventor del mismo vehículo poco antes del descarrilamiento.

Controles psicofísicos antes del servicio

Según las fuentes consultadas, otra de las novedades que Fomento y Renfe tienen encima de la mesa es la implantación de estrictos controles, pruebas y revisiones psicofísicas a los maquinistas.

Concretamente, se va a someter a los maquinistas a reconocimientos médicos, de manera aleatoria, en los que se revisarán los aspectos psicológicos que influyen en la conducción (estrés, cansancio, concentración...) antes de iniciar el servicio.

La ministra de Fomento, Ana Pastor, ya anunció también hace unas semanas en el Congreso otras medidas para mejorar el sistema ferroviario y reforzar su seguridad, como la revisión de los requisitos fijados para acceder a la profesión de maquinista de tren o diseñar una formación académica específica para estos profesionales.

 

Argentina cuenta con un operativo similar

Este sistema de vigilancia y control a los maquinistas ya tiene un precedente fuera de España. En febrero de 2012 se produjo en Buenos Aires un trágico accidente en el Metro de la ciudad que dejó 51 muertos y más de 700 heridos.

Las autoridades del transporte de la capital argentina decidieron entonces reforzar las condiciones de seguridad. Se decidió la instalación de cámaras de seguridad en el interior de las cabinas para vigilar el comportamiento de los conductores.

Conductores leyendo, con el móvil y durmiendo

De hecho, a principios del mes pasado, el Ayuntamiento de Buenos Aires hizo público el contenido de las primeras grabaciones registradas. El resultado fue demoledor.

Las cámaras captaron imprudencias de todo tipo. Desde un conductor que no podía mantener los ojos abiertos frente a la cabina de mando, hasta otro que aprovechaba para leer un libro, pasando por otro que no levantaba la vista de su teléfono móvil mientras guiaba el convoy.

También llamó la atención la actitud de un maquinista que, nada más empezar su turno de trabajo, colocó un trapo sobre la lente de la cámara para evitar ser controlado en su puesto de trabajo.

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