Si yo fuera Pedro Sánchez, ¿qué haría en Cataluña?

Creo que ya he comentado alguna vez que doy clases en el Centro Universitario Villanueva, a alumnos de tercer curso de Periodismo, sobre información y comunicación política. Y ayer puse en marcha con ellos una práctica singular.

Les lancé esta pregunta: ¿Si tú fueras Pedro Sánchez, qué harías en Cataluña? Más en concreto les planteé si aprobarían o no la puesta en marcha de la Ley de Seguridad Nacional, vistos los altercados violentos de estos días. Y también teniendo en cuenta, como factor que lo complica todo, que nos encontramos en unas difíciles vísperas electorales.

Evidentemente, hubo opiniones de todo tipo, incluida una, aislada, que proponía enviar el Ejército y tomar el control. El intercambio de puntos de vista incluyó argumentos a favor como los siguientes:

-El presidente del Gobierno está obligado a garantizar el normal desarrollo de la vida ciudadana en cualquier lugar del país. Si en Cataluña la situación está descontrolada, debe aplicar la Ley de Seguridad Nacional.

-Además, una actuación así, de firmeza y determinación, le proporcionará réditos electorales, porque la gente querrá apostar por alguien que pone orden en un problema tan delicado.

-La situación es controlable. Contamos en Cataluña con efectivos suficientes, de la Guardia Civil y de la Policía Nacional, como para frenar a los violentos y restaurar la normalidad.

Surgieron también, lógicamente, razonamientos contrarios a la oportunidad o conveniencia de tomar esa drástica medida. Como los siguientes:

-La idea de aplicar en Cataluña la Ley de Seguridad Nacional ha surgido de una propuesta de Pablo Casado. Aceptarla sería, por parte de Pedro Sánchez, dar una baza de imagen a su rival, el líder del PP.

-Su puesta en vigor tal vez puede proporcionarle votos en sectores de centro y derecha, pero es posible que se los quite por la izquierda. Y, por supuesto, los perderá de manera definitiva en Cataluña.

-Implantando la Ley de Seguridad Nacional se proporciona una victoria a los independentistas y violentos: habrán "demostrado" que son capaces de poner contra las cuerdas al Estado español.

-No hay que olvidar las repercusiones internacionales de una noticia que diga "España entra en alerta máxima de seguridad por el problema catalán". La confianza en nuestro país quedaría dañada, con consecuencias inmediatas en campos como el turismo y, sobre todo, los inversores internacionales.

Son valoraciones todas ellas interesantes. No tengo ninguna duda de que el principal implicado, Pedro Sánchez, lo mismo que su equipo más cercano, las estarán manejando. Y, por supuesto, otras más.

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