Margarita Robles acordó con Ayuso a espaldas de Sánchez y Bolaños que no apoyaría el pulso de Moncloa el 2 de mayo

La ministra de Defensa trasladó a la presidenta que la polémica no iba con ella, agradeció la invitación, y garantizó que no criticaría el veto al titular de Presidencia

Margarita Robles, Isabel Díaz Ayuso y Alberto Núñez Feijóo (Foto: Diego Radamés / Europa Press).
Margarita Robles, Isabel Díaz Ayuso y Alberto Núñez Feijóo (Foto: Diego Radamés / Europa Press).
Félix Bolaños trata de acceder a la tribuna en la fiesta del 2 de mayo (Foto: Diego Radamés / Europa Press).
Margarita Robles acordó con Ayuso a espaldas de Sánchez y Bolaños que no apoyaría el pulso de Moncloa el 2 de mayo. (Foto: Diego Radamés / Europa Press).

La Moncloa y la mayoría de ministros del PSOE han dado en las últimas horas una gran relevancia al incidente Ayuso-Bolaños. Sin embargo, la titular de Defensa, Margarita Robles, que representó al Gobierno en los actos del 2 de mayo en Madrid, se negó a respaldar el pulso protagonizado por el ministro de Presidencia contra Isabel Díaz Ayuso.

Lo sucedido “es un paso más en la campaña para deslegitimar a este Gobierno”, ha afirmado este miércoles la portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros.

“Es una campaña de ataque, que empezó con Casado, sigue con Feijóo, y Ayuso siempre en medio. Cuando se ataca a un Gobierno legítimo, se ataca a la democracia”, ha añadido.

Margarita Robles no se prestó al pulso

Pedro Sánchez y Félix Bolaños llevaban semanas preparando el choque institucional.

Según ha podido saber Confidencial Digital por fuentes del Ejecutivo, en medio del cruce de reproches entre el Gobierno central y la Comunidad de Madrid, en los días previos al 2 de mayo, la ministra de Defensa, Margarita Robles, trasladó en privado al entorno de Ayuso que ella no se iba a prestar a un pulso protagonizado desde Moncloa contra la presidenta.

Fue una iniciativa, una posición, de la que, sin embargo, no informó al equipo de Sánchez, según confirman fuentes del PSOE.

Robles se puso en contacto con altos cargos de la Comunidad de Madrid para confirmar su presencia en la Puerta del Sol como representante del Gobierno, y se desmarcó totalmente de los movimientos del ministro de Presidencia, con quien, por otro lado, mantiene fuertes discrepancias desde hace un año tras revelarse el espionaje con Pegasus y la disputa entre ambos por tener el control del CNI.

Aseguró que la polémica no iba con ella

Fuentes presenciales en la fiesta del 2 de mayo aseguran a ECD que la titular de Defensa se mostró en todo momento sonriente, y conversó con naturalidad con los presentes, entre ellos Alberto Núñez Feijóo, a su llegada a la sede del Ejecutivo madrileño.

Después, participó en todos los actos que se desarrollaron, primero en una ofrenda floral y después, situada al lado de Ayuso, en la tribunal principal durante el desfile militar.

 

Una vez concluida la parada militar, y durante el cóctel que se sirvió en el patio de la Real Casa de Correos, Robles volvió a mostrarse sonriente, “evidenciando que la polémica no iba con ella, tal y cómo había venido insistiendo al entorno de la presidenta de la Comunidad de Madrid en los días previos al acto.

Agradeció la invitación a Díaz Ayuso

Antes de abandonar la Puerta del Sol, según relatan las mismas fuentes, Margarita Robles se aplicó en encontrar a Ayuso, entre las decenas de personalidades que estaban presentes. En el equipo de la presidenta aseguran que buscó despedirse de ella personalmente y agradecerle la invitación, que a diferencia de Bolaños sí que había recibido.

Se interpreta como un gesto de cordialidad institucional con Ayuso, la “enemiga pública número uno del Gobierno” del que Robles forma parte. Una cortesía que no ha sentado bien en Moncloa.

No cuestionará el veto a Bolaños

La ministra de Defensa, que ha eludido emitir un juicio sobre el incidente de su compañero Bolaños en la Puerta del Sol, prometió antes a la organización del evento que no cuestionaría el veto.

No quiso hablar del pulso, ni en público ni en privado, aun teniendo opción para ello, ya que había centenares de cámaras cubriendo informativamente el acto.

En su entorno aseguran a ECD que en ningún momento se planteó no subir a la tribuna de autoridades para el desfile, pese a observar cómo al ministro de Presidencia se le cerraba el paso y quedaba desautorizado en público. No se planteó bajar y ubicarse junto a Bolaños.

Tampoco ha realizado ningún comentario después del incidente. De hecho, cuando los periodistas la interceptaron para arrancarle unas declaraciones sobre la polémica en la que se había visto implicado su compañero de Gobierno, respondió con una sonrisa y con un “Feliz Día de la Comunidad de Madrid”.

Alabanzas del PP a Margarita Robles

Al margen de la tensión entre Bolaños y Robles por la presencia en los actos del 2 de mayo, la ministra de Defensa se ha convertido también, para el PP y para algunos medios de comunicación, en un “icono del centroderecha”.

Sin ella pretenderlo, aseguran a Confidencial Digital varios ministros socialistas, el PP ha dado de vez en cuando continuidad a la teoría de un Gobierno de concentración liderado por Margarita Robles.

Es más, la propia ministra de Defensa tuvo que desmentir, durante los meses más duros de la pandemia, informaciones que la colocaban liderando una carrera por la presidencia del Gobierno tras apartar a Pedro Sánchez y apoyándose en los votos de los partidos de centroderecha.

El de Margarita Robles es un nombre más en la larga lista de presidenciables para un gobierno de concentración que han circulado en los últimos años, como los de Josep Borrell, José Bono y la vicepresidenta económica, Nadia Calviño. Unos perfiles que, por otro lado, gustan en ambientes empresariales y políticos de centroderecha.

El PP busca desgastar a Sánchez

Con motivo de la invitación al Día de la Comunidad de Madrid, el secretario general del PP regional, Alfonso Serrano, destacó que era un honor que la ministra de Defensa acudiera, “porque cuando se le ha pedido algo desde Madrid” siempre “ha respondido”.

En Moncloa consideran que la estrategia del PP pasa por “dividir al Gobierno”. Recuerdan que elogiar a un político suele resultar casi siempre perjudicial para el afectado. “Se despiertan las envidias de sus iguales, y no pocas veces provocan recelos entre los que se encuentran más arriba, temerosos de que alguien pretenda quitarles el sitio”.

Hay que recordar que Margarita Robles formó parte, junto a Pedro Sánchez, del grupo de diputados socialistas del “no es no” a Mariano Rajoy en 2016, fue duramente criticada por los que ahora la alaban en su etapa como portavoz en el Congreso, y pocos en el PSOE dudan de que volvería a serlo si estuviese al timón.

En el equipo del jefe del Ejecutivo entienden que “los elogios son de por sí ahora un elemento de desgaste contra el propio Sánchez”, algo que no ha pasado inadvertido en Presidencia. “Si Robles gusta a la derecha, no es que la derecha tenga un problema con el PSOE, sino que el tiro va contra el presidente”, aseguran.

Margarita Robles acordó con Ayuso a espaldas de Sánchez y Bolaños que no apoyaría el pulso de Moncloa el 2 de mayo.

Video del día

Abascal: “Hemos asistido a un bochorno internacional de consecuencias incalculables”
Comentarios