El adiós que marcará a Zaragoza: la tarjeta del bus que hizo historia

Durante más de dos décadas, la tarjeta bus de Zaragoza fue la llave diaria de la ciudad. Miles de zaragozanos la acercaron al lector sin imaginar que, en 2030, desaparecería para siempre.

Lo que comenzó como una revolución silenciosa en 2004 se prepara para cerrar su ciclo. Pero esta despedida no será inmediata: tres años de transición, casi los mismos que tardó en marcharse el bonobús de cartón en 2006, marcarán el paso hacia una nueva era digital.

La última validación: así dirá adiós la tarjeta del bus de Zaragoza. Imagenes Wikipedia
La última validación: así dirá adiós la tarjeta del bus de Zaragoza. Imagenes Wikipedia

La nueva contrata del autobús urbano de Zaragoza ha puesto fecha a un cambio histórico. La tarjeta bus de Avanza, en servicio desde 2004, dirá adiós definitivamente en 2030. En sus pliegos, el consistorio reserva medio millón de euros para su sustitución, y con ello se cerrará un ciclo que ha durado más de un cuarto de siglo.

Su destino se asemeja al del viejo bonobús de cartón, que se retiró el 15 de septiembre de 2006 tras 23 años de uso. Entonces fue una revolución tecnológica; hoy, su desaparición vuelve a marcar un punto de inflexión. Pero, ¿qué significará realmente para el usuario?

La tarjeta que cambió la forma de moverse en Zaragoza

En julio de 2004, el alcalde Juan Alberto Belloch y su equipo lanzaron la nueva tarjeta bus con un objetivo: facilitar los transbordos. Hasta entonces, cada viaje requería un bonobús físico de diez usos. Con la tarjeta, los viajeros podían enlazar trayectos ilimitados en menos de una hora sin coste adicional. El impacto fue inmediato: en un año se sumaron 6 millones de desplazamientos más, un aumento del 5,4 % en el uso del bus.

Solo una semana después de su lanzamiento, se vendieron más de 1.600 tarjetas. En 2024, casi dos décadas después, seguía siendo el título más usado: 61,9 millones de validaciones anuales, según datos oficiales del operador Avanza.

Ficha rápida de evolución

Etapa Sistema Años activo Características
1983–2006 Bonobús de cartón 23 años 10 viajes sin transbordo, validación con corte físico
2004–2030 Tarjeta bus Avanza 26 años Transbordos ilimitados en 60 min, tarjeta monedero
2030 → Tarjeta Ciudadana / Lazo En curso Integración digital, recarga online y móvil

Una transición con sabor a déjà vu

El paralelismo con 2004 es evidente: entonces fueron tres años de convivencia entre papel y plástico; ahora serán tres más entre tarjeta bus y Tarjeta Ciudadana. Los usuarios podrán seguir recargando sus títulos hasta 2029, pero poco a poco la validación se trasladará al móvil o a dispositivos NFC.

En su día, el cambio sorprendió por su facilidad: ya no se “engullía” el billete, bastaba con acercarlo al lector. Hoy, la nueva transición apunta a un futuro sin contacto físico, sin efectivo y con control de saldo en tiempo real. “Se trata de un paso hacia la movilidad inteligente”, señalan fuentes del Consorcio de Transportes de Zaragoza (CTAZ).

Qué ver en esta historia: del cartón al chip

  • 1983: nace el bonobús de cartón, símbolo del transporte moderno.
  • 2004: se lanza la tarjeta bus, inicialmente en la lanzadera C-2 (Arrabal–Parque Goya).
  • 2006: el bonobús se retira definitivamente.
  • 2011: llega el tranvía y la tarjeta se adapta a ambos medios.
  • 2030: la tarjeta bus se despide; será sustituida por títulos digitales.

Cuándo y cómo será el cambio

El Ayuntamiento prevé que la retirada se haga entre 2027 y 2030. Durante ese tiempo, ambas convivirán, mientras se adaptan las máquinas y se devuelve el depósito de las tarjetas activas, estimadas en cientos de miles. El coste de esta transición: 500.000 euros.

Actualmente, más del 65 % de los viajes se realizan con tarjeta, y solo el 8 % con billete sencillo. La digitalización total supondrá eliminar papel y plástico, además de un ahorro de emisiones y costes de gestión.

Consejos para los usuarios

  • Podrás seguir recargando tu tarjeta bus hasta 2029.
  • El saldo será transferible a la Tarjeta Ciudadana o Lazo.
  • Las nuevas tarjetas permitirán recargas automáticas y notificaciones por app.
  • Guarda tu tarjeta actual: será un recuerdo de colección.

Cerca de Zaragoza: otros pioneros

Ciudades como Bilbao, Valencia o Madrid ya completaron procesos similares. Zaragoza lo hará manteniendo su esencia pionera en movilidad. Y mientras llega 2030, cada validación con la tarjeta bus suena un poco más nostálgica. Porque detrás de ese “bip” diario se esconden más de 60 millones de viajes anuales y una historia que se va apagando sin ruido.

La tarjeta bus de Avanza será, desde 2030, parte del recuerdo colectivo de una ciudad que sigue moviéndose. Si quieres saber cuándo te tocará el cambio o cómo integrar tu tarjeta actual, puedes consultar el portal del Ayuntamiento de Zaragoza. Mejor hacerlo antes de que ese bip suene por última vez.