Defensa prioriza en licitaciones a empresas que contraten a ex militares
En un proceso para incorporar analistas de inteligencia, ha concedido más puntos a las ofertas que incluían a personal procedente de las Fuerzas Armadas
- Centro de Inteligencia de las Fuerzas Armadas
- Técnicos y analistas
- “Personal proveniente de Sapromil”
- Ofertas de trabajo para militares
- Objetivo: contratar empresas con militares
- Experiencia en unidades de inteligencia
- Adjudicado a dos empresas
- Militares en ACK3
- Ofertas en Sapromil
- Proyecto ‘Nexo’
- Defensa afirmó que no era posible
Contar con empleados que fueron militares en el pasado empieza a ser valorado en los procesos de licitación pública que lanzan órganos de contratación de la estructura del Ministerio de Defensa.
La recolocación en empresas privadas u organismos públicos de los militares temporales de Tropa y Marinería que cumplen 45 años es una de las exigencias que algunas asociaciones profesionales de las Fuerzas Armadas llevan años planteando al ministerio.
Hace un tiempo, en reuniones entre altos cargos de Defensa y representantes de las asociaciones profesionales de militares se comenzó a hablar de posibles cambios en los procedimientos de licitación, para que se pudiera favorecer de alguna forma a aquellas empresas que tengan en su plantilla a ex militares.
Se pensó como una forma de fomentar que compañías de la industria militar, o que prestan otros servicios más ordinarios, tuvieran un incentivo para contratar sobre todo a militares que tienen que abandonar las Fuerzas Armadas por edad.
Faltaba dar con una fórmula legal que permitiera favorecer a esas empresas, sin vulnerar la legalidad y los procedimientos que rigen la contratación pública, con libre concurrencia de empresas.
Centro de Inteligencia de las Fuerzas Armadas
Confidencial Digital ha podido comprobar que en fechas recientes la Jefatura de Asuntos Económicos del Estado Mayor de la Defensa ha formalizado la adjudicación de un contrato, dividido en tres lotes, consistente en “Servicios para el desarrollo de tareas relacionadas con los procesos de obtención de capacidades en el ámbito de la inteligencia en el CIFAS”.
El Centro de Inteligencia de las Fuerzas Armadas proporciona “la inteligencia militar precisa para alertar sobre situaciones internacionales susceptibles de generar crisis que afecten a la Defensa Nacional, así como de prestar el apoyo necesario, en su ámbito, a las operaciones militares”.
Este órgano lleva años contratando a personal civil externo como analistas, para proporcionar apoyo y asesoramiento en ciertos ámbitos no estrictamente militares sobre las áreas geográficas del mundo de interés para las Fuerzas Armadas.
En esta ocasión fue clasificado como “reservado” (el segundo mayor nivel de información clasificada) el Pliego de Prescripciones Técnicas, en el que se detallan los servicios que requiere el CIFAS.
Aunque este año no sea público ese pliego, en licitaciones de años anteriores sí se podía consultar, y señala las áreas de interés para las que se buscaban analistas que proporcionaran información y análisis sobre “diversos aspectos políticos, económicos y sociales de los países del ámbito de influencia” de las diferentes operaciones de mantenimiento de la paz en las que participan las Fuerzas Armadas españolas.
La licitación de 2022 contemplaba las áreas de Oriente Medio, Eurasia, Cuerno de África, América, amenazas emergentes, yihadismo, internacional, análisis de inteligencia (OSINT), dos analistas de contrainteligencia, analista traductor y analista ciber.
Técnicos y analistas
El Pliego de Cláusulas Administrativas Particulares sí da algunos datos de interés del nuevo contrato. Por ejemplo, el presupuesto base de licitación fue de 2.831.785,60 euros, a gastar entre 2023 y 204.
La licitación se dividió en tres lotes, no por áreas geográficas de interés a analizar, sino por “Lote 1: Servicios de técnico auxiliar de gestión de procesos”, “Lote 2: Servicios de técnico especialista en inteligencia” y “Lote 3: Servicio de analistas”, es decir, tres perfiles distintos de personal civil externo que buscaba contratar el Centro de Inteligencia de las Fuerzas Armadas.
“Personal proveniente de Sapromil”
En cuanto a los criterios de adjudicación, se estableció que “el Órgano de Contratación adjudicará el contrato al licitador que hubiera presentado la mejor oferta en base a la mejor relación calidad-precio”.
Los dos primeros lotes (técnicos auxiliares de gestión de procesos y técnicos especialistas en inteligencia) se ponderaron igual. Sobre un total de 100 puntos, el precio de la oferta económica se valoraba con 40 puntos, y la calidad, con 30 puntos que tuviera “Personal proveniente de Sapromil”, y otros 30 “otros criterios de calidad”.
Para el lote 3, de analistas, el criterio de que la empresa contara entre los analistas a “Personal proveniente de Sapromil” se reducía a sólo 9 puntos.
Las empresas interesadas debían indicar en sus ofertas “el número de profesionales ofertados provenientes de Sapromil”.
Ofertas de trabajo para militares
Sapromil es el Sistema de Aprovechamiento de Capacidades Profesionales del Personal Militar. Es una plataforma del Ministerio de Defensa que gestiona salidas profesionales para personal militar y Reservistas de Especial Disponibilidad de cualquier ejército, cuerpo, escala, especialidad y empleo que voluntariamente decida participar en este proyecto.
Oferta puestos de trabajo en empresas que están interesadas en contratar a militares en activo o retirados. Va especialmente enfocada, aunque no sólo, a ayudar a encontrar trabajo fuera de las Fuerzas Armadas a los militares temporales de Tropa y Marinería, que a los 45 años tienen que abandonar la vida militar.
Objetivo: contratar empresas con militares
Según distintas fuentes consultadas, esta licitación es la primera, o al menos, de las primeras, en las que un órgano de contratación del Ministerio de Defensa (en este caso, el Estado Mayor de la Defensa, de quien depende el CIFAS) incluye cláusulas para favorecer a las empresas que hayan contratado a militares a través de la plataforma Sapromil del propio ministerio.
Se cumple de este manera la reclamación que militares y asociaciones profesionales llevaban tiempo planteando. Veían justo que el Ministerio de Defensa contrate de forma preferente con aquellas empresas que muestren un compromiso con la integración de los militares en la vida profesional civil.
Tal y como se ha explicado, parece que Defensa ha resuelto las dudas jurídicas, y ha optado por valorar como un criterio de calidad el que la empresa interesada en prestar un servicio o suministrar ciertos productos cuente en su plantilla con ex militares que hayan sido fichados a través del Sistema de Aprovechamiento de Capacidades Profesionales del Personal Militar.
Experiencia en unidades de inteligencia
Este no era el único criterio, claro está. El Estado Mayor de la Defensa valoró otros requisitos.
Por ejemplo, daba puntos que el personal dominara algunos idiomas: inglés, francés, chino, ruso y árabe son los cinco que se valoraban.
También era un elemento a tener en cuenta que los técnicos o analistas tuvieran al menos un año de experiencia en el manejo de las aplicaciones habituales relacionadas con los sistemas de gestión de inteligencia en el ámbito del Ministerio de Defensa (SICONDEF, BICES, SIDAE, SIMENDEF), así como experiencia en unidades de inteligencia militar, o en organismos o centros oficiales donde se desarrollen labores de analistas de inteligencia.
Todo ello ayuda a que empresas que hayan contratado a militares destinados en unidades u organismos de inteligencia, reciban a su vez el encargo de ofrecer como analistas a estas mismas personas, ya con experiencia en estos ámbitos.
Además, un requisito imprescindible es que la empresa cuenta con la Habilitación de Seguridad de Empresa (HSEM) nivel ‘Reservado Nacional’, y que los propios trabajadores adscritos al contrato tengan la Habilitación Personal de Seguridad (HPS) también nivel ‘Reservado Nacional’.
No hay que perder de vista que se dedicarán a realizar análisis y estudios para el Centro de Inteligencia de las Fuerzas Armadas, por lo que manejarán documentos e información clasificada, que afecta a las necesidades de inteligencia de las Fuerzas Armadas y a la seguridad de los militares desplegados en misiones.
Adjudicado a dos empresas
Los dos primeros lotes fueron adjudicados a una misma empresa: ACK3 Consultoría de riesgos globales SL.
El Lote 1 “Servicios de técnico auxiliar de gestión de procesos” se le adjudicó por 556.921,5 euros, y el Lote 2 “Servicios de técnico especialista en inteligencia”, por 329.248 euros. En ambos casos, se justificó la adjudicación porque la empresa presentó la “mejor relación calidad-precio”.
El Lote 3 “Servicio de analistas” recayó en KRC Española, una empresa de ingeniería aeronáutico y de telecomunicaciones, y tecnologías de la información.
Militares en ACK3
En estas páginas ya se contó que la empresa ACK3 está integrada por un número importante de empleados que proceden de unidades de operaciones especiales, de unidades de inteligencia y también de guerra electrónica de las Fuerzas Armadas.
Esta empresa de consultoría estratégica de riesgos puso en marcha el proyecto ‘Nexo’, que tiene como objetivo establecer un proceso sistematizado y eficiente que facilite al personal que abandona las Fuerzas Armadas, por una u otra razón, su incorporación al mercado laboral civil, en puestos de interés estratégico y / o relacionados con la Defensa y Seguridad.
Su idea es “absorber el talento militar”, canalizarlo hacia la empresa privada, tanto hacia la propia ACK3 como hacia otras compañías que requieran perfiles que encajen con las competencias de los militares. Los responsables de la compañía consideran que estos militares pueden desarrollar una carrera profesional satisfactoria en el mundo civil, pero en ámbitos muy relacionados con lo que fueron sus tareas y misiones cuando estaban en las Fuerzas Armadas.
Desde el principio trataron de difundir el proyecto ‘Nexo’ y abrir canales con el Ministerio de Defensa para facilitar el salto de militares al mundo civil. Han mantenido contactos con la Dirección General de Reclutamiento y Enseñanza Militar, que gestiona la plataforma Sapromil; con delegaciones de Defensa repartidas por toda España; con otros mandos y organismos; y buscan otros canales alternativos, como asociaciones de veteranos de las Fuerzas Armadas.
Más de la mitad de la plantilla actual de la empresa entró en el marco del proyecto ‘Nexo’. Han ido incorporando oficiales, suboficiales, militares de la Escala de Tropa y Marinería, incluidos marineros, soldados y cabos temporales que tuvieron que salir de las Fuerzas Armadas al cumplir los 45 años.
También han fichado a personal militar que se encontraba en excedencia trabajando en otras empresas ajenas al ámbito de defensa y seguridad, personal militar en reserva trabajando a tiempo parcial, personal civil que trabajó en el Ministerio de Defensa.
Ofertas en Sapromil
ACK3 lanza con cierta frecuencia ofertas a través de la plataforma Sapromil: por ejemplo, ahí ha buscado militares que quisieran dar el salto a “analista de gestión y valoración de información para el área del Nilo”, o a “analista de gestión y valoración de información para el área del Golfo de Guinea”.
En esas ofertas, valoraba a militares con experiencia en misiones internacionales, incluidas las operaciones de seguridad marítima; con buen nivel de inglés; con experiencia en tareas de análisis de información; empleo militar mínimo de sargento; buena forma física; disponibilidad para desplegar en zonas remotas y poco permisivas, y capacidad para trabajar bajo presión y en entornos difíciles.
También requería que contaran con la Habilitación Personal de Seguridad. El hecho de incorporar a militares, y más de ciertas unidades y puestos, facilita que entren personas que ya han pasado por ese filtro de la Oficina Nacional de Seguridad. Si después los órganos de contratación de la administración militar requieren esa habilitación como requisito, esos empleados ya la pueden presentar.
Proyecto ‘Nexo’
Desde ACK3 celebran que con este tipo de cláusulas en licitaciones públicas el Ministerio de Defensa promueva que empresas privadas contraten a militares en activo y a reservistas de especial disponibilidad (RED), que son aquellos militares de Tropa y Marinería que ya dejaron el servicio activo por cumplir 45 años.
Destacan que ese es el mismo objetivo de su propio proyecto ‘Nexo’, y aplauden que de esta forma Defensa revalorice Sapromil.
Ese fue uno de los motivos por los que ACK3 decidió presentar ofertas a los lotes de este contrato de “Servicios para el desarrollo de tareas relacionadas con los procesos de obtención de capacidades en el ámbito de la inteligencia en el CIFAS”.
Además, ya contaban anteriormente con personal que estudia las áreas y países sensibles donde operan, y donde detectan nuevas oportunidades para su línea de negocio de consultoría estratégica de riesgos, y de apoyo al aseguramiento de la calidad de las operaciones de seguridad privada.
La propia empresa trata de conocer con detalle los teatros donde operan, y también tienen clientes que les piden análisis de países concretos.
Defensa afirmó que no era posible
Desde la Asociación de Tropa y Marinería Española (ATME) recuerdan que en 2021 ellos presentaron al Consejo de Personal un escrito en el que reclamaban medidas para favorecer la contratación de reservistas de especial disponibilidad (RED) por parte de empresas privadas.
Lamentaban por entonces que, pese a los convenios firmados por el ministerio con empresas y patronales, apenas se había avanzado en la contratación de militares por parte de esas empresas.
Por eso, plantearon que lo mejor sería que en las cláusulas administrativas de las licitaciones públicas se valorara la contratación de personal RED, de forma que así se fomentara que las empresas que contratan con Defensa tuvieran ese incentivo para incorporar a su plantilla a ex militares.
Desde la Dirección General de Reclutamiento y Enseñanza Militar del Ministerio de Defensa respondieron que “lo propuesto ya ha sido tratado en la Comisión Interministerial de coordinación y seguimiento de las medidas adoptadas por la Comisión de Defensa del Congreso de los Diputados. Se ha comprobado que es legalmente imposible establecer una bonificación concreta para este colectivo”.
Añadió el ministerio que “existe una reglamentación muy extensa que identifica los colectivos beneficiarios de esas ventajas entre los cuales nunca se ha considerado al personal RED, porque podría generar incertidumbre jurídica frente a otro tipo de colectivos”.
Sí admitió que “se está estudiando con el Ministerio de Hacienda la adopción de otras medidas más genéricas”.
Pero sobre la idea de que en las licitaciones del Ministerio de Defensa se favorezca la contratación de aquellas empresas que tenga contratado a este personal, señaló que “esta cuestión ha sido consultada a la Asesoría Jurídica General de la Defensa”.
La respuesta a esa consulta apuntó que la vigente ley de contratos del sector público no permite la inclusión de estas cláusulas dentro de los pliegos de condiciones técnicas, como se solicita.
Por otro lado la subsecretaria de Defensa aseguró en una reunión las empresas están muy interesadas en contratar personal RED realizando numerosas ofertas, pero muchos de estos ex militares rechazan las ofertas de trabajo, que, por diferentes razones, no consideran atractivas.
