El Gobierno organiza un acto para contar chistes contra Franco con la revista Mongolia
La representación forma parte de las actividades que conmemoran los 50 años de la muerte del dictador y tendrá lugar en la antigua cárcel La Modelo en Barcelona
- Chistes bajo censura
- Una representación documentada
- Colaboraciones y apoyos
- Una propuesta más amplia
El Gobierno, a través del Comisionado para la celebración de los 50 años de España en Libertad, ha programado para el próximo 1 de octubre una representación teatral en la antigua prisión de La Modelo de Barcelona que recupera los chistes contra Francisco Franco.
El acto, según explican los organizadores, se enmarca en la conmemoración del 50.º aniversario de la muerte del dictador y busca rescatar el humor clandestino que circuló durante el franquismo como forma de resistencia política y social.
La iniciativa está impulsada por el artista Eugenio Merino, el humorista Darío Adanti y la revista satírica Mongolia, en colaboración con el European Observatory of Memories y el Ayuntamiento de Barcelona.
Sus promotores sostienen que “el humor fue una de las pocas armas disponibles contra la represión” y recuerdan que contar un chiste podía tener consecuencias graves, como multas, detenciones o incluso cárcel.
Chistes bajo censura
Los impulsores explican que la obra incorpora algunos de los chistes que circularon de manera anónima durante la dictadura y que, según subrayan, servían para ridiculizar al régimen. Uno de ellos plantea:
—¿Sabes por qué la cara de Franco aparece tan satisfecha en los sellos?
—Porque hasta los que le odian tienen que lamerle por detrás.
Otro de los relatos, recuperado de las recopilaciones de la época, ironiza sobre la represión durante la dictadura:
Franco y su mujer estaban en la cama. Carmen Polo, inquieta, le dice a su marido: “Anda, Paco, vamos a joder…”. El Caudillo se levanta de un salto, corre a su despacho y empieza a firmar sentencias de muerte.
Los organizadores sostienen que estos ejemplos muestran cómo el humor popular “funcionaba como válvula de escape y a la vez como un acto de memoria disidente”.
Una representación documentada
Según han informado los responsables del proyecto, la periodista y actriz Ana Alonso participa en la obra con lecturas de textos y documentos de la época que contextualizan los chistes y muestran la represión política, la pobreza y la situación de las mujeres durante el franquismo.
Los promotores añaden que la propuesta “no se limita a la comicidad”, sino que pretende abrir un debate sobre el legado de la dictadura y los discursos negacionistas actuales.
El acto en La Modelo será presentado por la historiadora Matilde Eiroa. Después de la función, se celebrará un coloquio en el que intervendrán Merino, Adanti y Alonso.
En él, según la organización, se abordarán cuestiones como la memoria histórica, el papel del humor político y los retos que plantean las "corrientes revisionistas" en la actualidad.
Colaboraciones y apoyos
El proyecto ha contado con la colaboración de especialistas en historia contemporánea y memoria democrática. Entre ellos se encuentran el hispanista Paul Preston, el historiador Miguel Ángel del Arco, el arqueólogo Alfredo González-Ruibal, el presidente de la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica, Emilio Silva, y la periodista Olga Rodríguez.
Según destacan los organizadores, la participación de estas voces ha permitido “dar solidez académica a una iniciativa artística que conecta pasado y presente”.
Además de la obra, el proyecto se complementa con un libro editado por Mongolia que recopila testimonios y reflexiones en torno al humor antifranquista. La publicación ha sido posible gracias a una campaña de micromecenazgo que, según la revista, recaudó más de 15.000 euros.
Una propuesta más amplia
Los responsables recuerdan que esta no es la primera vez que se representan los chistes contra Franco. Desde noviembre de 2024, coincidiendo con el aniversario de la muerte del dictador, se organizan funciones mensuales cada día 20 en el Teatro del Barrio de Madrid.
En esas representaciones, Adanti interpreta los chistes recopilados por el escritor satírico P. García, colaborador de La Codorniz, cuyos volúmenes se publicaron en la Transición.
Según explican, estas sesiones mensuales han buscado “mantener vivo el recuerdo de un humor perseguido y rendir homenaje a quienes lo practicaron”. En ellas, Alonso también interviene con lecturas de ensayos que revisan críticamente la dictadura, la transición y los primeros años de la democracia.

