El crucero chino que revolucionará los ríos europeos en 2026
Un barco de lujo con acento chino surcará por primera vez los ríos del corazón de Europa. Se llama Century Star y es el gran proyecto de Century Cruises, la compañía que domina el turismo fluvial en el Yangtsé.
Diseñado junto al astillero neerlandés Concordia Damen, el nuevo crucero promete una experiencia inédita: lujo oriental, ingeniería europea y una visión global del turismo que cambiará la forma de viajar por el Rin y el Danubio.
El Century Star no será un barco más en los ríos europeos. Con una capacidad de 176 pasajeros y tecnología de última generación, marcará el desembarco de China en el mercado fluvial europeo, hasta ahora dominado por navieras como Viking o AmaWaterways.
Su construcción ya está en marcha en los talleres de Concordia Damen, en los Países Bajos, un referente en embarcaciones sostenibles. La entrega está prevista para 2026, según comunicó la propia Century Cruises. El proyecto simboliza la creciente conexión económica y cultural entre Europa y China, que en 2025 celebran medio siglo de relaciones diplomáticas.
Century Star: por qué está en boca de todos
| Especificación | Dato |
|---|---|
| Capacidad | 176 pasajeros |
| Constructor | Concordia Damen (Países Bajos) |
| Operador | Century Cruises (China) |
| Inicio de operaciones | 2026 |
| Ríos previstos | Rin, Danubio, Sena (expansión futura) |
Más allá de sus cifras, el barco promete un concepto distinto: lujo silencioso y sostenible. Utilizará propulsión híbrida, materiales reciclables y un sistema de gestión de residuos inspirado en los modelos fluviales del Yangtsé. “Será un ejemplo de eficiencia y confort en un solo diseño”, señalan fuentes cercanas al astillero neerlandés.
El interior combinará minimalismo europeo y elegancia oriental: suites con ventanales panorámicos, gastronomía fusión chino-europea y zonas de descanso inspiradas en los jardines de Hangzhou. Todo diseñado para un público exigente, que busca travesías lentas, culturales y de bajo impacto ambiental.
Qué ver y hacer a bordo del Century Star
El recorrido inicial incluirá el tramo más escénico del Rin Medio, entre Colonia y Rüdesheim, Patrimonio Mundial de la UNESCO. Desde la cubierta, los viajeros contemplarán castillos medievales, viñedos verticales y pueblos que parecen detenidos en el tiempo.
- Degustaciones de vino riesling en Koblenz y Boppard.
- Excursiones culturales a Heidelberg y Estrasburgo.
- Rutas en bicicleta paralelas al cauce del Rin.
- Sesiones de té chino al atardecer, con música tradicional.
La experiencia promete unir dos culturas a través del turismo fluvial: la tradición europea de navegar lentamente y la filosofía oriental de contemplar el paisaje sin prisa.
Cómo llegar y dónde embarcar
El embarque principal estará en Colonia, con conexiones directas en tren de alta velocidad desde Bruselas, Ámsterdam y París. Los itinerarios se extenderán gradualmente al Danubio, con paradas en Viena y Budapest. Según Damen Shipyards, la compañía estudia incluir rutas por el Sena en 2027.
Cuándo ir y consejos
La mejor temporada para disfrutar de un crucero por el Rin será entre abril y octubre, cuando el caudal permite una navegación estable y las temperaturas rondan los 22 °C. En primavera, los almendros florecen junto al río; en otoño, el paisaje se tiñe de ocres y dorados, un espectáculo que desde la cubierta parece pintado.
Datos prácticos & mapa
El Century Star ofrecerá paquetes de 7 a 10 noches, con tarifas iniciales estimadas desde 3.200 € por persona. Incluirán alojamiento, pensión completa, excursiones guiadas y actividades culturales a bordo. Según datos de Eurostat, el turismo fluvial europeo creció un 12 % en 2025, impulsado por viajeros de Asia y Norteamérica.
Cerca del Rin: el siguiente destino
El impacto del Century Star podría sentirse más allá del Rin. Fuentes del sector apuntan que el Duero portugués y el Tajo internacional están en estudio para rutas conjuntas con operadores ibéricos. Si se confirma, España podría convertirse en el siguiente escenario de la expansión fluvial china.
El primer crucero chino en Europa no solo es una operación comercial: es un símbolo de cómo el turismo, la ingeniería y la diplomacia pueden navegar en la misma dirección. Y el viaje, esta vez, apenas acaba de empezar.

