El CNI alerta de la intensa actividad de los Hermanos Musulmanes en España
Un informe del servicio de inteligencia detalla que tienen presencia en los ámbitos social, educativo, económico y político
- Negativa del Ministerio de Justicia
- No justificó la “buena conducta cívica”
- El CNI señaló “motivos de interés nacional”
- Los Hermanos Musulmanes
- “Ámbitos social, educativo, económico y político”
- Expulsado un imán de Logroño...
- ... y otro de Cáceres
- La implantación en España
- Alertas del CNI ante extranjeros
El Centro Nacional de Inteligencia ha conseguido impedir que el Ministerio de Justicia concediera la nacionalidad española a un hombre de origen marroquí que reside en España desde 2011.
El servicio de inteligencia emitió un informe que resultó clave para que Justicia se inclinara por denegar el pasaporte español a este marroquí, alegando “motivos de orden público o interés nacional”.
Negativa del Ministerio de Justicia
Confidencial Digital ha conocido una sentencia reciente de la Sala de lo Contencioso-Administrativo de la Audiencia Nacional, que resolvió el recurso que presentó ese hombre contra la denegación de la nacionalidad española por parte del Ministerio de Justicia.
Él había presentado en julio de 2017 una solicitud de nacionalidad española por residencia, y, cuando entendió que el ministerio lo había desestimado, al no recibir respuesta, recurrió ante la Audiencia Nacional.
Finalmente el 19 de julio de 2021 recibió contestación del Ministerio de Justicia. La decisión era no concederle la nacionalidad española.
No justificó la “buena conducta cívica”
Justicia explicó entonces que denegaba la petición porque el interesado no había justificado “buena conducta cívica”.
El Código Civil establece en su artículo 21.2 que “la nacionalidad española también se adquiere por residencia en España, en las condiciones que señala el artículo siguiente, y mediante la concesión otorgada por el Ministro de Justicia, que podrá denegarla por motivos razonados de orden público o interés nacional”.
Para la concesión de la nacionalidad por residencia “se requiere que ésta haya durado diez años”, y “en todos los casos, la residencia habrá de ser legal, continuada e inmediatamente anterior a la petición”.
Se establecen varios requisitos: “El interesado deberá justificar en el expediente regulado por la legislación del registro civil, buena conducta cívica y suficiente grado de integración en la sociedad española”, según el artículo 22.4 del Código Civil.
El CNI señaló “motivos de interés nacional”
Según el Ministerio de Justicia, este hombre de origen marroquí no había acreditado la “buena conducta cívica”, y según un informe del CNI, se le debía denegar el pasaporte español por “motivos de orden público o interés nacional”.
El aviso del Centro Nacional de Inteligencia había señalado que este marroquí era “miembro activo del movimiento islamista radical Hermanos Musulmanes”, al que se define como “una organización de tendencia política muy influyente dentro del mundo islámico y que cuenta con una amplia estructura internacional”.
Los Hermanos Musulmanes
La hermandad fue fundada en 1928, en Egipto, por Hassan al-Banna, quien veía a Occidente como una sociedad corrupta (por entonces, Reino Unido controlaba Egipto). Abogaba por que las enseñanzas del Corán y la Sunna (tradición de los primeros tiempos del Islam) fueran la base de la legislación y la organización social, y no dudó en apoyar la idea de la yihad para extender por la fuerza el Islam a todo el mundo.
Esta organización fue ganando miembros a lo largo de las décadas, atacó con las armas a los británicos y a distintas autoridades egipcias, y en paralelo fue creando una red de hospitales, mezquitas, centros sociales por Egipto, lo que le hizo ganar un apoyo social muy importante.
Al caer el régimen de Hosni Mubarak en 2011, en el marco de la llamada Primavera Árabe, los Hermanos Musulmanes lanzaron el partido Libertad y Justicia, que fue el más votado en las primeras elecciones parlamentarias.
El candidato de los Hermanos Musulmanes, Mohamed Morsi, ganó las elecciones presidenciales en 2012. Gobernó, hasta que un golpe militar, después de protestas populares contra sus planes para concentrar más poderes, le arrebató el poder en 2013.
Dejando de lado su fugaz paso por el poder en Egipto, los Hermanos Musulmanes cuentan con numerosos seguidores en muchos países, también en algunos de mayoría musulmana, como Siria.
“Ámbitos social, educativo, económico y político”
Esa es la organización que preocupaba al CNI en este caso, al haber detectado que el marroquí solicitante de la nacionalidad española era miembro activo de los Hermanos Musulmanes.
Según el informe que el servicio de inteligencia trasladó al Ministerio de Justicia para recomendar la denegación del pasaporte, “la doctrina que difunde el movimiento de los Hermanos Musulmanes se basa en una interpretación radical del Corán, con el objetivo de establecer un califato regido por la ley islámica (sharía)”.
Es más, de acuerdo con el análisis del CNI, “los Hermanos Musulmanes pretenden establecer en los países occidentales un ‘estatuto personal del musulmán’”. Así se denomina la pretensión de que se permita a los musulmanes mantener un régimen propio islámico, distinto del legal, en cuestiones de derecho civil, como el matrimonio, el divorcio, la custodia de los hijos...
En esa difusión por todo el mundo de su “interpretación radical del Corán” para establecer un califato regido por la sharía, y en su intención más concreta de obtener un estatus especial para los musulmanes en los países occidentales, los Hermanos Musulmanes actúan “en los ámbitos social, educativo, económico y político”, según alerta el Centro Nacional de Inteligencia en el citado informe.
Expulsado un imán de Logroño...
El informe, o al menos la parte del mismo que recoge la sentencia, no aporta más detalles sobre qué indicios tiene el CNI de la actuación de los Hermanos Musulmanes “en los ámbitos social, educativo, económico y político” de España.
Lo cierto es que no es la primera vez que los servicios de inteligencia e información actúan frente a personas vinculadas a los Hermanos Musulmanes.
En junio de 2018, las Fuerzas de Seguridad expulsaron a Egipto a Alaa Mohamed Said, imán que pasó por dos mezquitas de la ciudad de Logroño. Desde el año 2008 era presidente de la Unión Islámica de Imames y Guías de España.
La Secretaría de Estado de Seguridad ordenó detener y expulsar del país a este egipcio por tratar de establecer en la capital de La Rioja el principal centro de difusión del mensaje más radical de los Hermanos Musulmanes en el norte de España.
Para ello, había logrado recaudar hasta 1,5 millones de euros en donativos de fieles riojanos, de comunidades vinculadas a los Hermanos Musulmanes en países europeos, y de personas afines de Arabia Saudí, Catar y Kuwait. Estaba tratando de levantar una gran mezquita en Logroño.
Un año después de la expulsión a Egipto, la Audiencia Nacional avaló la legalidad de esa medida, frente al recurso judicial que interpuso Said.
... y otro de Cáceres
La historia se repitió en 2022. En octubre de ese año, la Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras de la Policía Nacional en Cáceres detuvo en Talayuela a Yahya Benaouda, presidente de la comunidad islámica de esa localidad y de la comarca de Campo Arañuelo.
La Comisaría General de Información, la unidad de investigación antiterrorista de la Policía, le había acusado años antes de difundir el salafismo en esa zona de Extremadura, de exhortar a los fieles a mantener una interpretación rigorista del Islam y a mantenerse apartados de la sociedad española, y de ser afín a los Hermanos Musulmanes y al movimiento islamista marroquí Justicia y Caridad.
Yahya Benaouda fue detenido, enviado a Madrid y expulsado a Marruecos, y poco después la Audiencia Nacional, de nuevo, confirmó esa expulsión.
La implantación en España
Algunos organismos especializados, como el Real Instituto Elcano y el Observatorio Internacional de Estudios sobre Terrorismo, han publicado en los últimos años artículos sobre la implantación de los Hermanos Musulmanes en España, desde los años 60 del siglo pasado.
Uno de esos artículos relaciona con los Hermanos Musulmanes al sirio Riay Tatary, quien fundó en los 70 la Asociación Musulmana de España, en 1990 creó la Unión de Comunidades Islámicas de España (UCIDE), fue imán de la mezquita Abu Bakr, una de las más importantes de Madrid, y llegó a presidente de la Comisión Islámica de España (CIE), una de las principales entidades representativas de los musulmanes en España.
Tatary siempre negó su pertenencia a los Hermanos Musulmanes. Murió en 2020.
Sobre la presencia de los Hermanos Musulmanes en España, el medio The Arab Weekly publicó, después de los atentados yihadistas de agosto de 2017 en Cataluña, que los Mossos d’Esquadra habían detectado que esta cofradía había aumentado su influencia entre la comunidad de musulmanes de esa autonomía.
Alertas del CNI ante extranjeros
Como ocurrió en este caso, en algunos procedimientos de concesión de la nacionalidad el Centro Nacional de Inteligencia emite informes para advertir de que no es buena idea que a ese extranjero, el solicitante, se le permita acceder a la nacionalidad española.
En los últimos años, han sido frecuentes los casos que han llegado a la Audiencia Nacional en los que extranjeros, muchas veces marroquíes, recurren porque el CNI ha bloqueado la concesión de la ciudadanía española, bajo la acusación de que son islamista radicales y de que apoyan a grupos yihadistas, o de que al menos pertenecen a corrientes rigoristas, como Justicia y Caridad, el Tabligh y el salafismo.
También ha habido denegaciones de la nacionalidad a marroquíes a los que el CNI tenía en su radar por colaborar o tener algún tipo de relación con los servicios de inteligencia de Marruecos.
En ocasiones más extremas, cuando la amenaza para la seguridad nacional es mayor, y más urgente, a propuesta de la Comisaría General de Información de la Policía Nacional (como en el caso del imán de Talayuela), o de la Jefatura de Información de la Guardia Civil, la Secretaría de Estado de Seguridad ordena la expulsión de ese extranjero del territorio nacional.
