La Guardia Civil compra pistolas no israelíes para su nueva policía aérea
Ha elegido el modelo de la austriaca Glock. La adquisición de armas cortas Ramon causó una gran polémica por los fallos de algunas unidades
“Unidad Nacional de Escoltas de Seguridad en Vuelo”. Es el nombre que eligió la Guardia Civil para los agentes especializados que, 21 años después de los atentados del 11 de septiembre en Estados Unidos con aviones comerciales, han empezado a desplegarse en vuelos en España.
La unidad se presentó el pasado octubre con motivo de la reunión del Comité Internacional de Agentes de Seguridad en Vuelo en Palma de Mallorca, en la que participaron delegaciones de Canadá, Alemania, Australia, Austria, Holanda, India, Israel, República Checa, Rumanía, Singapur, Suiza y Vietnam.
Para entonces, la unidad llevaba algunos meses funcionando: la Dirección General de la Guardia Civil indicó que estos escoltas, “conocidos internacionalmente como Air Marshalls”, ya habían realizado previamente varios vuelos e iba a desplegar “todas las capacidades en nuestro país en aeronaves españolas, tanto en vuelos domésticos como internacionales, con el fin de dar una respuesta policial en caso de amenazas”.
La creación de la Unidad Nacional de Escoltas de Seguridad en Vuelo se remontaba meses atrás: “Con motivo de la pasada cumbre de la OTAN, se constituyó la creación de la Unesev (Unidad Nacional de Escoltas de Seguridad en Vuelo de la Guardia Civil), que, por primera vez en nuestro país, ha desplegado esta capacidad policial en aeronaves españolas”.
Compra de pistolas Glock
Confidencial Digital ha consultado una licitación pública de la Jefatura de Asuntos Económicos, de la Dirección General de la Guardia Civil, que ya ha sido adjudicada y que tenía por objeto el “Suministro de pistolas semiautomáticas cal.9x19mm Parabellum y accesorios para la Unidad de seguridad en vuelo del Servicio de Costas y Fronteras de la Guardia Civil”, es decir, esta nueva unidad que infiltra agentes de paisano en los aviones comerciales, para reaccionar a posibles intentos de secuestro y otros incidentes terroristas.
Se tramitó como un contrato menor, y es posible consultas pliegos en los que se detalle la cantidad de armas que se adquirieron. Sólo se detalla que se adjudicó el contrato por 6.571,11 euros, a la empresa Apsa Paukner SA.
Esta compañía es la distribuidora en España de Glock, una marca muy conocida de armas de origen austriaco. El modelo de pistola Glock también fue elegido por la Dirección General de la Policía para sustituir los viejos revólveres Astra que usaban los policías nacionales de paisano, de unidades de Información (antiterrorismo, entre otras misiones) y Policía Judicial.
Guardian y Emtan
ECD se puso en contacto con Guardian Defense & Homeland Security, la empresa que distribuye en España las pistolas del fabricante israelí Emtan. Guardian y Emtan fueron las empresas a las que la Guardia Civil compró miles de pistolas modelo Ramon, para empezar a sustituir las pistolas Beretta que usan la mayoría de unidades de Seguridad Ciudadana del cuerpo.
Lo hizo para preguntar si Guardian y Emtan habían presentado su oferta a la licitación pública para suministrar pistolas semiautomáticas del calibre 9 x 19 mm Parabellum para la nueva Unidad Nacional de Escoltas de Seguridad en Vuelo de la Guardia Civil, y si esa oferta había sido en este caso superada por la de Apsa Paukner con el modelo Glock.
El representante legal de las empresas Emtan y Guardian Defense & Homeland Security respondió que ninguna de estas dos compañías de armamento participó en este proceso de adquisición de pistolas por parte de la Guardia Civil.
El motivo por el que no presentaron oferta en esta ocasión es que la licitación para la Unidad Nacional de Escoltas de Seguridad en Vuelo “tenía por objeto la compra de un modelo de pistola compacta para agentes camuflados” y, asegura el representante legal, Guardian y Emtan no comercializan este tipo de modelo de arma corta.
Las pistolas compactas o subcompactas tienen un tamaño menor, y por eso se opta por ellas para aquellas unidades cuyos agentes trabajan de paisano, y por tanto realizan porte oculto, es decir, llevan el arma escondida debajo de la ropa y tratan de no ser identificados como miembros de las Fuerzas de Seguridad.
Los problemas con las Ramon
La Guardia Civil adquirió miles de unidades del modelo Ramon de Emtan. Hace meses, algunas asociaciones profesionales de guardias civiles dieron la voz de alarma: con las nuevas pistolas que habían llegado ya a las comandancias y unidades se estaba registrando un número inusualmente alto de interrupciones, es decir, de casos en los que el arma se encasquillaba, al disparar en galerías de tiro.
El fabricante (Emtan) y el distribuidor (Guardian) se defendieron de la catarata de críticas, e incluso de burlas sobre lo que algunos denominaron “pistolas low cost”, que supuestamente habían sido elegidas por ser las más baratas entre las ofertas presentadas.
Por su parte, el Gobierno aseguró que “de las 6.144 pistolas” Ramon suministradas por Emtan y Guardian, “87 han sufrido incidencias durante la realización de ejercicios de tiro”. Es decir, los fallos se habían registrado en el 1,41% del total de las armas cortas modelo Ramon que se habían entregado a la Guardia Civil.
Además, explicó que se había realizado un cambio de piezas en todas las armas suministradas, para así evitar que la uña extractora de las vainas diera problemas con la munición en servicio en la Guardia Civil.
Si ahora para la Unidad Nacional de Escoltas de Seguridad en Vuelo, la Guardia Civil ha optado por pistolas Glock, recientemente el Servicio de Vigilancia Aduanera decidió apostar por la continuidad, y sacó a licitación una compra de 300 armas cortas, pero especificando que quería HK USP Compact 9 mm, las mismas que ya usan sus agentes y que por ejemplo también están en servicio en la Policía Nacional y en el Ejército de Tierra.